Este viernes, el ministro de Salud, Daniel Salas, habló de la necesidad de recuperar el rastro del nuevo coronavirus.
Eso significa buscar a quienes tuvieron contacto con una persona infectada para advertirles que podrían estar contaminados y ponerlos en cuarentena mientras se determina si portan el virus.
La trazabilidad de los contagios la recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), para la cual sí es posible incluso existiendo transmisión comunitaria.
Desde hace meses, la OMS insiste a los países que el rastreo de contactos es una medida esencial de salud pública y componente crítico en estrategias integrales para controlar la propagación de covid-19, la enfermedad resultante del nuevo coronavirus.
Ese rastreo, explica la entidad, rompe las cadenas de transmisión de persona a persona al identificarse quiénes se expusieron a casos confirmados. Luego, se les pone en cuarentena, se les da seguimiento para garantizar un aislamiento rápido y se les realizan pruebas y tratamientos en caso de que presenten síntomas.
Sin embargo, la entidad mundial aclara que un elemento crítico para lograrlo es “el compromiso de la comunidad y el apoyo público”.
Para lograrlo, recomienda que la comunicación pública sobre el rastreo de contactos enfatice valores como “la solidaridad, la reciprocidad y el bien común”.
Así lo declara un documento guía de la OMS dirigido a las autoridades de salud titulado Rastreo de contactos en el contexto del covid-19 publicado el 10 de mayo.
Ese compromiso y apoyo público, dice el documento, apunta a un aspecto esencial: conseguir que las personas no se muevan de un sitio a otro mientras las autoridades sanitarias hacen muestreos para recobrar la pista.
En ese mismo sentido, el ministro Daniel Salas afirmó este viernes que “recuperar el rastro del contagio del virus es la gran misión que tenemos que llevar adelante todos. De los ciudadanos, necesitamos que haya la menor movilización, que no haya movilización”.
¿Para qué afanarse en tal rastreo si ya hay transmisión comunitaria? El propio documento de la OMS lo aclara:
“Cuando los países han superado el pico de transmisión y el número de casos está disminuyendo, y particularmente cuando se dictan estrictas medidas de distanciamiento social y de salud pública, la identificación rápida de casos y el seguimiento de contactos son críticos para mantener bajos niveles de transmisión e identificar y romper nuevas cadenas de transmisión rápidamente”.
El 1º. de julio anterior, María Van Kerkhove, epidemióloga experta en enfermedades infecciosas y directora técnica en covid-19 de la OMS, manifestó que al margen de si hay o no transmisión comunitaria, “hay que encontrar, probar y aislar casos, hacer un seguimiento de contactos. Romper cadenas de transmisión. Es importante que cuando comiencen los conglomerados, los países actúen agresivamente para eliminarlos“.
Salas ahondó en este punto este viernes al considerar que la transmisión comunitaria detectada en Costa Rica no es “súper intensa”. Sí admitió que el riesgo es alto. Recordó que Costa Rica permanece sin presentar niveles de 1.000 casos diarios, por lo cual considera que aún hay tiempo de aplicar un “mazo fuerte” en la Gran Área Metropolitana para recuperar la trazabilidad.
“Recuperar ese rastro es la misión que tenemos en los días por delante; en este periodo de aplicación del martillo, no necesariamente se verá reflejada una reducción de casos y no se verá de forma inmediata, pero sí tenemos que tener ese rastro detallado del virus”, expresó el ministro.