El sindicato de empleados del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) confirmó, este viernes, la renuncia de la gerenta general de la entidad, María Gabriela Vallejo Astúa.
El secretario del Sindicato de Trabajadores de Acueductos y Alcantarillados (Sitraa) Mario Rodríguez, aseguró a este diario que Vallejo hará efectiva su renuncia a partir del 25 de agosto.
La funcionaria tenía bajo su responsabilidad la ejecución del proceso de reestructuración del Instituto, anunciado por el Gobierno en abril pasado. En ese momento, la Presidencia Ejecutiva de la entidad había denunciado la supuesta existencia de una estructura paralela, razón por la cual planteó un cambio en la estructura de la institución.
Frente a la salida de la gerenta, la entidad se limitó a contestar mediante su oficina de comunicaciones que no se cuenta con “información oficial al respecto”.
También se intentó localizar a Vallejo a su teléfono celular pero no atendió las llamadas ni respondió los mensajes vía whatsapp.
De acuerdo con Rodríguez, también el Sindicato solicitó a la Administración el documento de renuncia de la gerenta pero no se los entregaron. Asimismo, el dirigente gremial adelantó que aparte de Vallejo otra funcionaria responsable de Capital Humano habría planteado su salida a partir del 1.° de setiembre.
Dos directivas
A principios de este mes, dos directivas del Instituto presentaron su dimisión. Beverly Hernández Castro y María Fernanda Jiménez Morales dejaron el cargo después de que saliera a la luz un conflicto interno relacionado con la adjudicación de un contrato de ¢2.000 millones a una compañía china, mediante un cartel que carece de multas o castigos en caso de incumplimientos de la empresa elegida.
Hernández Castro alertó en su carta de dimisión sobre una crisis institucional debido a la incapacidad para presentar datos precisos sobre la contabilidad tarifaria. Esta carencia obstaculiza el cumplimiento de los requisitos estipulados por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), tanto para el ajuste de las tarifas como para obtener los fondos esenciales para el funcionamiento del AyA.
Hernández afirmó además que actualmente no existe una estrategia que asegure la sostenibilidad en la prestación del servicio a los 794.000 abonados que la institución atiende. Esta postura coincide con la advertencia emitida por Aresep el mes pasado, que destacaba el riesgo de interrupciones en los servicios debido a problemas en la gestión de proyectos en el seno del AyA.
Colaboró la periodista Valeria Martínez.