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Las persistentes lluvias provocadas por la tormenta tropical Sara obligaron a 3.057 personas a pasar la noche de este viernes en albergues, según el reporte más reciente de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
Este número representa un aumento del 60% en comparación con los 1.909 damnificados registrados el jueves pasado debido a las inundaciones causadas por las intensas precipitaciones de esta semana.
El incremento en el número de afectados también llevó a habilitar más albergues: de 40 pasaron a 47 en las últimas 48 horas, la mayoría ubicados en Guanacaste y Puntarenas, las provincias más golpeadas.
Alejandro Picado Eduarte, presidente de la CNE, informó de que solo en Puntarenas se contabilizan 597 incidentes relacionados con inundaciones, lo que obligó a evacuar a más personas de manera preventiva durante la noche del viernes.
En Guanacaste, los mayores desplazamientos se concentran en Santa Cruz, donde siete albergues alojan a 437 personas, de las cuales 257 permanecen en el salón comunal de Sardinal.
Carrillo también reporta 995 personas distribuidas en 11 sitios de refugio, mientras que otros 939 damnificados están ubicados en salones comunales, gimnasios y escuelas en los cantones de Cañas, Bagaces, Nicoya, La Cruz, Liberia y Nandayure.
En Puntarenas, las áreas más afectadas incluyen comunidades indígenas como La Casona, en Coto Brus; el Territorio Indígena Alto Conte, en Golfito; y Rey Curré, en Buenos Aires. En estas zonas, 433 personas están distribuidas en nueve albergues. Además, en Garabito, Osa, Parrita, Paquera y Quepos, 288 damnificados permanecen en 10 refugios temporales, a la espera de poder regresar a sus hogares.
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Distribución de ayuda y suministros básicos
Picado Eduarte destacó que la CNE, junto con otras instituciones, continúa llevando alimentos y suministros esenciales a las comunidades aisladas por las lluvias.
Entre los esfuerzos realizados, citó misiones de entrega de víveres y paquetes de higiene para pescadores del Pacífico Central y habitantes de las islas Chira, Venado y Caballo, quienes esta semana no han podido salir a buscar alimentos debido a las condiciones meteorológicas.
Además, este sábado ingresaron al país siete furgones provenientes de El Salvador con diarios de alimentos, los cuales se distribuirán entre las familias de los cantones afectados durante el fin de semana.
Afectaciones en servicios públicos
Por su parte, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) informó de que, hasta la mañana de este sábado, 91.889 abonados habían sufrido interrupciones en el servicio eléctrico debido a las lluvias. De ese total, el 99,6% ya cuenta nuevamente con energía, aunque 407 casos siguen pendientes de resolución, concentrándose principalmente en el cantón central de Puntarenas.
En el caso de telecomunicaciones, el ICE reporta la resolución de 99 averías, mientras que otras 27 están pendientes. Las cuadrillas enfrentan dificultades para desplazarse a las zonas afectadas debido a las condiciones climáticas adversas.
Asimismo, el ICE indicó que todas sus agencias con horario sabatino están operando, excepto las ubicadas en Parrita (Puntarenas) y Carrillo (Filadelfia, Guanacaste), que permanecen cerradas por las condiciones del tiempo.
