La diabetes es una de las enfermedades crónicas más comunes en Costa Rica, pues uno de cada seis adultos la padece, de acuerdo con datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Sin embargo, uno de cada cuatro lo desconoce.
Solo en la semana epidemiológica 39 del año, que abarcó del 22 al 28 de setiembre, se diagnosticó la enfermedad a 9.606 personas, indicó el Ministerio de Salud. La cifra representó un promedio de 35 casos por día.
Entretanto, un estudio de estimación basado en las encuestas nacionales de la Caja señaló que en los últimos 10 años, se ha detectado un promedio de 19.985 casos de diabetes tipo 2 por año; es decir, dos casos por hora.
De acuerdo con Roy Wong McClure, de la subárea de Vigilancia Epidemiológica, en el país hay unas 458.000 personas con diabetes, de ellas, cerca de 120.000 no conocerían de su condición.
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¿Qué es la diabetes?
La diabetes no es solo un tipo de enfermedad, sino varios con causas y manifestaciones distintas. No obstante, todos tienen algo en común: la forma como el páncreas procesa los niveles de azúcar en la sangre.
En la relación del organismo con el azúcar hay una hormona clave llamada insulina. El páncreas produce la insulina y esta se encarga de que la glucosa que proviene de los alimentos entre a las células y provea energía. Esta hormona también controla la velocidad a la que la glucosa se consume dentro de las células.
Hay tres tipos principales de diabetes: la tipo 1, la tipo 2 y la gestacional (también conocida como tipo 3). Hay un cuarto grupo en el que se incluyen otros tipos con causas genéticas, por medicamentos, o derivadas de otras enfermedades, cirugías o problemas en el páncreas.
En términos generales, una persona debería estar en niveles de entre 80 y 90 ml/dl en ayunas y no superar los 130 ml/dl. Dos horas después del desayuno no debe superar los 180.
En el caso de la diabetes gestacional, los valores en ayunas deben ser de 95 ml/dl o menos, una hora después debe estar en 140 ml/dl o menos y dos horas después en 120 o menos.
La diabetes tipo 1 normalmente empieza a presentarse en la niñez, aunque hay algunas personas que la sufren más tarde. En este tipo, el páncreas no produce insulina. Sin la insulina, la glucosa permanece en la sangre y se acumula.
En la diabetes tipo 2 el cuerpo genera resistencia a la insulina. El páncreas sí produce esta hormona, pero en menor cantidad o simplemente “no sabe usarla”. El organismo impone una barrera para que esta sustancia no funcione o las células no respondan correctamente a ella. Como resultado, el azúcar no entra a las células para ser usada como fuente de energía, y se acumula en la sangre.
El 85% de los diabéticos están en esta categoría.
La diabetes gestacional se diagnostica en el segundo semestre del embarazo. El cuerpo no produce ni utiliza toda la insulina que necesita para la gestación. Sin suficiente insulina, la glucosa no puede “salir de la sangre” y convertirse en energía. El nivel de glucosa sube porque se acumula en la sangre.
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¿Cómo prevenir la diabetes?
Estas son las recomendaciones de las autoridades de salud
- Mantenga un peso adecuado
- Haga ejercicio. Al menos 150 minutos a la semana, repartidos en al menos 30 minutos cinco veces por semana
- No fume
- No consuma bebidas alcohólicas
- No coma “comida chatarra”
- Al menos una vez al año revise su presión arterial y su nivel de glucosa.
- Duerma satisfactoriamente al menos siete horas diarias.
En los niños, la prevención del sobrepeso y la obesidad es necesaria.
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¿Cómo controlar la diabetes?
El primer paso es estar atento a estas señales:
- Sensación de mucha sed
- Necesidad de orinar con más frecuencia de lo habitual
- Visión borrosa
- Cansancio
- Pérdida de peso involuntaria
Si se le diagnostica la enfermedad, el control es necesario para evitar complicaciones.
- Monitoreo diario de los niveles de azúcar en la sangre.
- Alimentación balanceada
- Tome los tratamientos según la indicación médica
- Ejercicios