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Valverde Vega, Alajuela. Los agricultores de San José de Trojas, en Valverde Vega, están preocupados de que la ceniza expulsada el lunes en la erupción del volcán Poás afecte sus cultivos.
Este es el caso de Olga Cruz y Bonifacio Jiménez, quienes en estos días notaron cómo las hojas de las plantas de sus cafetales se tornaron de color gris, por la caída del material volcánico que fue arrastrado por el viento.
Sin embargo, a criterio de Erick Fernández, geográfo del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), esta no es una situación que debe preocupar a los locales, ya que los efectos del fenómeno son acumulativos y se intensifican con la cantidad y frecuencia con la que cae el material.
“Los vecinos están preocupados porque tienen problemas de ceniza y gas. Esto no debe inquietarlos ya que la erupción del lunes es algo normal en un volcán activo”, dijo.
Según el Ovsicori, la erupción registrada se denomina freática, lo que significa que el lago caliente del Poás acumuló cierta presión debajo del agua. Cuando esta energía logra sobrepasar la presión hidroestática, se libera en forma de una columna de gases y agua. Colaboró: Jorge Esquivel
