Los padres de alumnos del Conservatorio de Castella convocaron a una reunión de emergencia la noche de este viernes tras enterarse de que la Fundación del Conservatorio de Castella vendió la propiedad de 1.546 metros cuadrados en Sabana Norte, donde se encuentra el teatro Arnoldo Herrera. La venta consta en el Registro Nacional, el cual anotó este 1.° de marzo una compraventa y una hipoteca efectuadas el pasado miércoles 28 de febrero.
En dicho documento no se detalla quién adquirió el terreno, inscrito como finca número 524964, ni la suma de dinero. Sin embargo, la Junta Directiva del Conservatorio de Castella y los padres de alumnos del centro educativo criticaron esta decisión y expresaron su intención de impedir la compraventa.
La polémica entre la Junta Directiva del Castella y la Fundación surgió en junio del 2023 cuando trascendió la posible venta de esa propiedad que se encuentra en una ubicación estratégica en San José, lo cual le da un alto valor.
Ingrid Vargas, directora de la Junta, informó a La Nación que impondrán las denuncias penales correspondientes en contra de la Fundación, al considerar que “si bien tienen la propiedad registralmente, no es cierto que sea de ellos”.
Vargas explicó que todos los bienes de una fundación deben de estar dirigidos para el objetivo por el cual fue creada. En el caso de la Fundación del Conservatorio de Castella, mencionó que surgió para establecer un conservatorio de música y, puesto a que esto ocurrió hace 70 años, actualmente, “no tiene ninguna posibilidad de existir”.
“Se llama usurpar el uso y el disfrute que han tenido generaciones de artistas en este lugar. El legador, Carlos Millet de Castella, regaló 250 metros cuadrados, ¢100.000 y el resto del teatro lo donó el Ministerio de Educación. Ahora el teatro lo financia el Estado costarricense”, agregó Vargas.
Además, la directora afirmó que esta semana presentaron una denuncia ante la Contraloría General de la República (CGR) por esta misma razón, aunque no proporcionó más detalles porque los afectados todavía no han sido notificados.
Angie Barrantes, integrante de la Junta, añadió que hasta el momento la Fundación no se ha puesto en contacto con la Junta ni con los padres de familia. En cambio, señaló que la relación ha sido distante durante las últimas dos décadas, periodo en el cual la Fundación se mantuvo inactiva.
Barrantes, quien también es exalumna del Conservatorio, expresó su intención de proteger el interés superior de la niñez en cuanto a la educación artística de calidad que ofrece el Castella.
Por otra parte, Rebeca Ross, madre de un estudiante en el Conservatorio, indicó que, a partir de la reunión de la noche de este viernes, establecerán un plan para resolver la situación y asegurar que sus hijos continúen con su educación, ya que el teatro es una parte integral de la misma. Por lo tanto, el próximo lunes 4 de marzo consultarán en el Registro Nacional para obtener más detalles sobre la compra del terreno.
La Nación llamó por teléfono a Gustavo Rojas, actor y presidente de la Fundación, pero al cierre de esta información no fue posible. En junio pasado, él declaró que las instalaciones donde opera el colegio, en Ulloa, Heredia, afrontan “órdenes sanitarias porque el edificio se está cayendo” y, por esa razón, la Fundación “pretende buscar alternativas para salvarlo” y están analizando “20 alternativas”.
El Conservatorio de Castella cuenta con 1.100 estudiantes, entre primaria y secundaria. En el 2001 se emitió el decreto 29324-MEP, mediante el cual el ministro de Educación de ese entonces, Guillermo Vargas, le daba y reconocía al Castella su condición de ente público.