Creímos y anunciamos que era uno, pero al final resultaron ser dos.
La semana pasada dimos la noticia de que la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) galardonó al periodista de La Nación, Mauricio Herrera, con el premio SIP Bartolomé Mitre, por una serie de reportajes sobre la drogadicción.
Pero, ayer nos enteramos de que no fue uno, sino dos los premios que esa organización concedió a este diario.
El segundo, el premio SIP Miguel Otero Silva, lo ganó el periódico por la cobertura completa del proceso electoral pasado, que culminó con la elección de José María Figueres como presidente de la República.
Ese trabajo periodístico que abarcó alrededor de un año, fue diseñado y dirigido por Edgar Fonseca, y en él participaron, en una u otra forma, todos los miembros de la redacción. Y fue una nueva forma de abordar el proceso electoral, que se salió de la cobertura tradicional para abordar otras áreas que incluyeron encuestas, entrevistas a gente común, participación directa del público a través de líneas abiertas de teléfono y mucho más.
La intención, según explicó Víctor Hugo Murillo, uno de los jefes de información del periódico, fue establecer la ruta de las informaciones ligadas a las elecciones y no dejar que el proceso marcara la pauta.
Los resultados de ese esfuerzo son ahora valorados por la SIP al otorgar este premio que es auspiciado por el rotativo El Nacional de Caracas y consiste en $1.000 y un diploma.