De los $30 millones (¢9.240 millones) provenientes del contrato de préstamo realizado entre Costa Rica y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para atender las emergencias provocadas por los huracanes César y Mitch , en la zona sur, a la fecha no se ha girado ningún recurso.
Con este planteamiento, el regidor de la Municipalidad de Corredores, Rigoberto López Castro, presentó una denuncia formal ante la Defensoría de los Habitantes el pasado 19 de mayo.
"De la manera más respetuosa, me dirijo a tan honorables señores, para hacer su conocimiento la forma negligente, irresponsable e increíble en que han actuado tanto los diputados, como el Gobierno, con los dineros destinados a la zona sur, para solucionar los problemas ocasionados con los huracanes César y Mitch ", dice textualmente la misiva.
Presión local
López recalcó que las autoridades de Corredores han enfrentado mucha presión por parte de la comunidad y los miembros de la Comisión local de Emergencias "quienes nos piden cuentas sobre el dinero que dio el BID y que nunca fue desembolsado".
Agregó, "los dineros nunca llegaron a su destino final; no ha llegado un solo centavo al cantón".
La denuncia está siendo atendida por la Defensoría, según informó su titular, Sandra Piszk.
Piszk explicó que ya solicitaron a las partes involucradas toda la información del caso para realizar la investigación y, posteriormente, emitir un pronunciamiento.
López insistió en la urgencia de desembolsar los dineros, sobre todo cuando se anuncia que la presente estación lluviosa será muy fuerte.
Añadió que en estos momentos los vecinos de Corredores ya temen el desbordamiento de los ríos, que en algunos lugares ya están socavando el terreno, como es el caso de varias comunidades de Ciudad Neily.
"Un puente que debía repararse ya está destruido, los caminos que debían arreglarse están dañados", recalcó en su carta el regidor.
No menos molesto dijo estar el diputado de la zona, Tobías Murillo, quien aseveró que el problema es "responsabilidad del Presidente (Miguel Ángel Rodríguez) y el Ministerio de Hacienda".
La Nación intentó infructuosamente conocer la versión de Rodríguez y del ministro de la Presidencia, Danilo Chaverri.
Sin embargo, Rebeca Madrigal, del departamento de prensa de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), dijo que hasta donde se tiene conocimiento, dichos fondos aún no han ingresado a esa institución.
De acuerdo con el convenio suscrito con el BID, desde 1996, los $30 millones (¢9.240 millones) debían entregarse divididos en tres entregas de $10 millones (¢3.080 millones) cada una.
De acuerdo con una nueva modificación hecha en 1999, a la Ley 7901 en su artículo 2: "el Poder Ejecutivo destinará $10 millones, provenientes del segundo desembolso para realizar los proyectos de construcción, reconstrucción y mantenimiento de infraestructura en la zona sur, así como aquellos que vengan en respaldo de los productores agrícolas de la zona indicada, necesarios para enfrentar los daños causados por los huracanes César y Mitch ".
Para el diputado Murillo las prioridades de dichos dineros han sido otras.
"Para qué Ley de Emergencias si el Gobierno no permite que se cumpla. Ellos han estado jineteando esa plata y dándole otros usos. Mientras tanto, en San Vito los productores no tienen caminos por dónde sacar la producción", enfatizó.
Temor latente
Aproximadamente 90 familias que habitan en la ciudadela González de Corredores se sienten atemorizadas por los estragos que pueda provocar el presente invierno, aunado al deterioro que dejaron los huracanes César en 1996 y Mitch en 1998.
"Hemos acudido a la Municipalidad y ahí nos dicen que no hay peligro. Cuando llueve demasiado por las noches no podemos conciliar el sueño por miedo a que el río Corredores se desborde e inunde nuestras casas", dijo Yeilyn Badilla, vecina del lugar.
El presidente del comité local de Emergencias, Víctor Julio Esquivel, comentó que con los recursos que se tiene están valorando los puntos críticos del cantón para poder enfrentar alguna eventualidad.
"Nuestro comité no maneja tanto dinero como para contratar maquinaria pesada y abrir de esta manera un poco el cauce del río", insistió.