María Teresa Rodríguez ganó Miss Costa Rica hace 16 años. Desde ese entonces, se le relaciona como una embajadora de la belleza, siempre en los focos de campañas publicitarias y programas televisivos. Pero ahora cambió de rol y actualmente es ella quien se encarga de la estética de las demás personas.
En el 2020 abrió su primer salón de belleza, el cual tuvo que cerrar por la pandemia. Desde finales del 2022 pudo retomar su empresa al abrir otro local en Belén llamado Blu Beauty Center. Según comenta, es un negocio familiar que comparte con Valentina Corrales, su sobrina, y Mariana Pipa, su cuñada.
“Para el primer Blu estuvimos haciendo remodelaciones como por seis meses, porque invertimos en muebles hechos a la medida y demás. Lo último que me iba a imaginar es que se iba a venir una pandemia”, explicó la exreina de belleza.
Este emprendimiento ofrece servicios estéticos a hombres y mujeres, que van desde manicura, peluquería y hasta masajes. Su norte como emprendedora, asegura, es brindarles a las personas una experiencia de autocuidado que impacte en su autoestima.
“Para mí es súper importante que las personas se sientan bien consigo mismas y saquen su tiempo para chinearse; de eso se trata Blu. Nosotros no somos un salón express, que en una hora la clienta vas a estar lista. Nos tomamos el tiempo y queremos que sea una experiencia para nuestros clientes”, declaró la modelo.
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Rodríguez asegura que su gusto por la estética viene desde que era niña, pues su abuela se dedicó a este oficio durante muchos años y por ese motivo está familiarizada con los procesos de los salones de belleza.
“Yo me hacía las uñas desde muy chiquitita, fue la manera que encontré de no morderme mis uñas. Como me gustaba muchísimo pintármelas, siempre prestaba mucha atención. A veces necesitaba hacerme las uñas y los salones estaban llenos, así que ahí fue cuando dije ‘esto podría ser un buen emprendimiento’”, relató la ex reina de belleza.
Enfatiza en que ella no es profesional en estilismo y que tiene un profundo respeto por el gremio. En Blu Beauty Center ejerce como manicurista y hace algunos procedimientos capilares, mientras que sus dos familiares sí se formaron en esta área. Los productos que utilizan son veganos y libres de crueldad animal.
Su cuñada es estilista y cosmetóloga, y ha ejercido este oficio durante muchos años en otros salones, por lo que otro de los puntos positivos que destaca Rodríguez, es cumplirle el sueño de tener su propio local. Por otro lado, su sobrina es estudiante universitaria, pero la apoyaron para especializarse debido al talento que desarrolló como manicurista.
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Otro familiar a quien incluyó en el negocio es su hermano, quien es cocinero. Gracias a él, el salón ofrece el servicio de alimentación y las personas que lo soliciten pueden adquirir un menú personalizado tomando en cuenta sus gustos y si el cliente tiene alergias o intolerancias
Más allá del conocimiento para aplicar los procedimientos, esta experiencia la ha obligado a entender el mundo de los negocios. De acuerdo con la presentadora, todo lo aprendió a punta de errores con una única regla fija: no desistir.
“Se trata de seguir luchando por los sueños e ideales que uno tiene y no darse por vencido a la primera, ni a la segunda, ni la tercera. Si uno tiene una meta hay que trabajarla y tratar de que los resultados sean positivos, y si no lo son pues cambiar la metodología, pero siempre seguir adelante”, comentó.
María Teresa Rodríguez combina su faceta como emprendedora con su rol como presentadora del programa 7 Estrellas, de Teletica, y los trabajos de modelaje que realiza.