Aunque todavía no ha tomado una decisión, el canciller Manuel González, dijo hoy que habrá una sanción contra el embajador en Caracas, Federico Picado, por opinar sin autorización y de forma contraria a la posición del Gobierno sobre la política interna de Venezuela.
"Tengo que darle una recomendación final al presidente (Luis Guillermo Solís) y después en conjunto tomaremos una decisión, tenemos que determinar si el señor se mantiene o es cesado. Si se mantiene bajo qué condiciones sería, si procede una reprimenda fuerte o una amonestación".
"La sanción más severa es el cese, y la menos severa es no hacer nada, que por supuesto no va con mi manera de pensar. Leve, grave o gravísima, esto tiene sus consecuencias", agregó.

Según González, las declaraciones de Picado dadas a La Nación en una entrevista publicada el domingo generan confusión sobre la postura de Costa Rica en torno a la situación en Venezuela.
"Esto no es una cuestión solo de personas, no es Manuel González, no es el señor Picado, aquí hay una posición del país que tiene que quedar clara, y lo que él dijo afecta lo que hemos ido construyendo (…). Lo que él dijo no es consecuente con la posición oficial y eso ha generado confusión", reconoció el canciller.
Picado dijo a La Nación que a su llegada a Caracas, hace casi dos meses, encontró un país diferente al que exponen algunos medios en el extranjero y que allí existe "libre tránsito" en el quehacer de la prensa y que los desabastecimientos de productos se deben, en parte, a esfuerzos del "gran comercio" por desestabilizar el gobierno de Nicolás Maduro.
También apoyó los superpoderes que le dio la Asamblea Nacional venezolana a Maduro para que pueda crear leyes por decreto durante nueve meses, dadas las declaraciones del presidente estadounidense, Barack Obama, de calificar la situación en Venezuela como una "amenaza" a la seguridad nacional y la política exterior de su país.
La sanción que recibirá Picado se podría conocer este mismo día o más tardar el próximo viernes.
González dijo que la decisión se podría prolongar hasta el final de la semana porque él debe viajar esta tarde a Guatemala para asistir a una reunión del Sistema de Integración Centroamericana (SICA): "El problema es el tiempo que me tiene contra la pared. Tengo que salir ahora en la tarde y tengo reuniones muy seguidas. No habría previsto que esto fuera a suceder".
González explicó que Picado, al igual que el resto de embajadores, conocía sobre las limitaciones que existen en el servicio exterior para exteriorizar sus opiniones y que incluso, recibió una capacitación de más de tres semanas.
"No es un capricho de esta administración, ni es un tapabocas que se me ha ocurrido a mí, sino que es una legislación que existe de 1965 harto conocida, y además, casi que innecesario tener que andarla recordando cuando es evidente el cuidado con el que todo representante diplomático tiene que actuar, aunque no sea embajador", expresó el jerarca de la diplomacia nacional.