“El mundo despertando ojalá ya se acabe esta vaina de las mascarillas que como dice el video solo genera miedo y odio”, escribió una mujer identificada como Maureen Arauz en un grupo de difusión de Telegram.
Junto a su comentario, envió el video de una conferencia de prensa que ofreció el grupo autodenominado “Médicos de América en la Primera Línea”, en los peldaños del edificio de la Corte Suprema de Estados Unidos.
En la grabación, un grupo de personas con batas blancas habló durante 35 minutos sobre cómo, supuestamente, las mascarillas no frenan la transmisión del SARS-CoV-2, sino que son un mecanismo para someter y controlar a la población.
En Facebook, esa misma transmisión está marcada como información falsa. Quienes se la encuentren tienen a su disposición una serie de chequeos realizados por verificadores independientes, con los insumos científicos que comprueban la efectividad de los cubrebocas para contener la pandemia de covid-19.
Pero en Telegram, ese tipo de advertencias no existen. De forma que el video que reproduce desinformación sobre la emergencia sanitaria se envió, sin ningún aviso, al chat que administra la plataforma de desinformación “Los Ignorantes”.
Esta plataforma la inició en el 2019, el músico y productor Luis Alonso Naranjo, quien un año antes colaboró en la campaña presidencial de su primo, Fabricio Alvarado.
Su página de Facebook, que ya acumula 69.600 seguidores, es el centro de operaciones del portal. Pero ahora, sus administradores también la usan para invitar a los cibernautas a unirse a su canal de Telegram, con el fin de burlar las políticas contra noticias falsas del gigante tecnológico.
Hasta este viernes, el canal de una vía en el que “Los Ignorantes” envía contenido suma 2.215 suscriptores. El chat público, en el que cualquiera puede participar, acumula 500 usuarios.
La estrategia no es exclusiva de dicho foro. En realidad, se trata de una práctica ya común entre otros portales que distribuyen desinformación de forma sistemática, como “Patricio Villeda” y “Médicos por la Verdad Costa Rica”.
Ambos sortean los filtros antidesinformación de Facebook mediante sus canales de Telegram, los cuales suman, respectivamente, 3.590 y 169 suscriptores.
Encriptada y sin supervisión
Telegram se convirtió en la alternativa ideal para las plataformas de desinformación ticas que buscan evadir las estrategias de Facebook para frenar la distribución de noticias falsas, en particular las que se refieren a la pandemia de covid-19.
La razón principal es que, a diferencia de otras redes sociales públicas como Facebook, Instagram o Twitter, las comunicaciones en aplicaciones de mensajería como Telegram están encriptadas. Eso quiere decir que nadie, ni siquiera los administradores del sistema, pueden saber de qué hablan sus usuarios.
“Patricio Villeda” se aprovecha de dicha característica para enviar noticias falsas, por la libre, en su canal. Para hacerlo, simplemente publica en Facebook el enlace con el que cualquier usuario se puede suscribir a su canal de Telegram.
Por lo general, las invitaciones las acompaña con la promesa de publicar contenido “tan duro”, que sería rápidamente censurado por Facebook.
“Recuerde suscribirse a nuestro canal de Telegram, ahí —como ustedes saben—, soltamos las varas a calzón quitao y sin censura de ningún tipo”, publicó el administrador, en Facebook, el 5 de agosto.
El mismo gancho lo utilizó en un posteo a mediados de este año, en el que instó a sus seguidores a ir a su canal de Telegram a ver un video que, supuestamente, prueba que la ex primera dama estadounidense Michelle Obama es hombre.
Se trata de una información errónea que circula en Internet desde hace años con base en fotografías alteradas de Obama, las cuales aparecen marcadas como “falsas” en Facebook con base en verificaciones realizadas por medios de comunicación.
Aun así, el 16 de mayo, “Patricio Villeda” replicó la mentira y la vinculó al presidente de la República, Carlos Alvarado, y a la pandemia de covid-19.
"Todos esto está MUY relacionado con el Nuevo Orden Mundial, que es a lo que se refiere carlitos ahora todos los días cuando dice “NUEVA NORMALIDAD”. TODO ES DEMASIADO EVIDENTE. EL VIDEO ESTÁ GUINDADO EN EL CANAL DE TELEGRAM. Soque antes de que nos lo bajen...”, dice esa publicación.
Mientras tanto, “Médicos por la Verdad Costa Rica” se vale de la ausencia de supervisión para difundir imágenes y videos que niegan la existencia de la pandemia, rechazan la necesidad de utilizar mascarillas y promueven el dióxido de cloro como tratamiento
El 16 de octubre, por ejemplo, ese foro envió en su canal un video en el que un grupo de doctores europeos afirma que “no hay evidencia de una pandemia”, pese a que múltiples verificadores, como la agencia de noticias AP, han evidenciado que dicho audiovisual replica desinformación.
De acuerdo con un reportaje del medio de comunicación indio The Quint, Telegram también es el ambiente ideal para la reproducción de desinformación porque su capacidad para difundir mensajes es más amplia, incluso, que la de otras aplicaciones de mensajería.
Shesh Sarangdhar, presidente de la firma de evaluación de seguridad informática Seclabs and Systems, dijo a The Quint que mientras una pieza de desinformación puede viajar a hasta 625 personas en WhatsApp, en Telegram puede llegar a hasta 100.000 personas.
Las particularidades de Telegram y otras aplicaciones de mensajería también han exacerbado la polarización y la desinformación en otros países del mundo.
En julio del 2018, la cadena de noticias BBC reportó cómo el gobierno de India le solicitó acciones urgentes a WhatsApp para detener “la difusión de mensajes irresponsables y masivos” sobre falsos secuestros de niños, con base en los cuales turbas habían matado, hasta ese momento, a 17 personas.
Según otra publicación de Quartz, en este mismo país, previo a las elecciones generales del 2019, cadenas de información falsa en Telegram también atizaron la violencia contra la población musulmana.
‘Señores de Facebook, ya no los necesitamos’
La migración de grupos reproductores de desinformación de un espacio digital a otro no es inusual.
Jeremy Blackburn, científico informático de la Universidad de Birmingham, explicó al medio de comunicación Wired que se trata de una transición bastante común cuando estos diseminadores de noticias falsas son restringidos o del todo exiliados del sitio en donde operan.
“En su investigación sobre comunidades exiliadas de Reddit, Blackburn encontró que algunos miembros de estos grupos se desalientan de seguir participando, pero muchos otros tienden a seguir al grupo a alguna área más permisiva y alejada de Internet.
“En estas plataformas alternativas, la gente tiende a radicalizarse entre ellos mismos y el grupo puede volverse aún más extremo”, publicó Wired en agosto pasado.
En la misma publicación, Richard Rogers, investigador de cultura digital de la Universidad de Ámsterdam, explicó que eso está ocurriendo con los grupos que están migrando para escapar de las políticas antinoticias falsas de Facebook.
“Le sirve a Facebook, pero no le ayuda a la web ni a la sociedad en general porque solo traslada el problema a otro lado”, dijo Rogers, en referencia a la decisión de Facebook de prohibir las páginas vinculadas a la teoría conspirativa QAnon.
En Costa Rica, las plataformas diseminadoras de desinformación dicen estar preparadas para continuar operando pese a las restricciones del gigante tecnológico.
“Señores de Facebook: Cuando quieren nos censuran o nos banean (prohíben) la cuenta, ya no los necesitamos... Ya somos una marca, y el canal de distribución es lo menos importante”, publicó “Patricio Villeda” el 5 de agosto.
LEA MÁS: QAnon, la teoría conspirativa, recluta seguidores en Costa Rica
Esta información forma parte del proyecto #NoComaCuento, una iniciativa de La Nación que busca analizar la veracidad de la información que circula en redes sociales. Usted puede formar parte de este proyecto enviándonos información que le parezca falsa o poco confiable al WhatsApp 6420-7160 o al correo nocomacuento@nacion.com.
También puede recibir nuestras publicaciones directamente en su celular uniéndose a este grupo de WhatsApp o al bot de Telegram.