Servir a la patria siempre ha de ser motivo de orgullo, y no servirse de ella; sin embargo, para algunas personas, no siempre es así. Basta con leer los artículos publicados en La Nación los días 4 y 5 de noviembre, en los que informa sobre privilegios que gozan ciertos funcionarios de la Caja Costarricense de Seguro Social, como el uso de vehículos institucionales pagados por el pueblo.
En los hallazgos de los periodistas, que de no ser por su valentía no nos enteramos y todo seguiría igual, llama la atención el doble discurso de los jerarcas de gobierno en materia de contención del gasto. En ello pecan la Dirección Ejecutiva y la misma Auditoría Interna.
Los sindicatos solo alzan la voz para pedir aumento de salarios, no en defensa del dinero que es del pueblo. Los odiosos privilegios, aunados al desgaste de vehículos, quizás se venga dando desde muchos años antes sin que nadie estuviera enterado, bienvenida la prensa objetiva.
Arturo Alvarado Moya, Desamparados
Presas en Cartago
Es hora de que el ministro de Transportes y el director de Tránsito intervengan para enviar a las colapsadas calles de Cartago oficiales, pero para que sea una policía preventiva y no represiva. El pueblo está cansado de presas y ausencia de tráficos.
Eduardo Sancho Ortiz, Cartago
Cannabis recreativo
Un proyecto de ley pretende “legalizar, controlar y regular el consumo y comercialización del cannabis con fines recreativos”. El IAFA, durante la última campaña presidencial, condenó la acción de “promover deliberada e irresponsablemente el consumo con fines no medicinales en las redes sociales, omitiendo que la marihuana es una sustancia psicoactiva capaz de producir dependencia, alteraciones cognitivas, conductuales y mentales significativas”, sobre todo a edades tempranas.
El IAFA dio seguimiento durante 5 meses a 40 adolescentes con edades entre los 11 y los 17 años, consultantes en sus servicios de atención ambulatoria. El 97,5% consumió marihuana al menos una vez; un 90%, alcohol; un 72%, tabaco; y un 20%, cocaína. La edad promedio de inicio fue los 12 años. Abrir de par en par las puertas a la marihuana no garantiza nada positivo para nuestra juventud. Mens sana in corpore sano.
Silvia Gagneten Barbetta, Rohrmoser
Impuesto sobre impuesto
No es solo increíble que el marchamo aumente cada año y que el dinero destinado a reparación de calles se use para solventar el gasto creciente de una estructura estatal que no conoce la mesura. El marchamo incluye el impuesto sobre el valor agregado (IVA). No es un servicio ni un producto.
Si una persona usa el dinero asignado a una causa para financiar otra, va a la cárcel por malversación de fondos, lo que se aplica al marchamo porque el MOPT dice que no hay fondos, después de recaudar más ¢300.000 millones. A los que tenemos seguro, nos obligan a pagar el del INS. ¿Cuándo van a legislar para el pueblo? Yo tengo un auto del 2012 y pago ¢333.000. No me molestaría si las calles estuvieran en buenas condiciones.
Georgina González Hall, San José
Trenes hacia Cartago
Dada la emergencia vial que se vive en Cartago, es necesario incrementar el número de trenes que salen desde la estación en Cartago centro. Las filas se hacen enormes porque no todos pueden abordar el tren. También estos viajan sobrecargados, lo que no deja de ser un peligro.
Alba Montenegro Rivera, San Nicolás de Cartago
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