Dependiendo del origen hidrogeológico de la fuente, el agua contiene minerales como calcio, magnesio, hierro, manganeso y otros. Su equilibrio osmótico es esencial para prevenir enfermedades crónicas como la artritis, la colitis, el asma, la hipertensión y la diabetes.
La diabetes, por ejemplo, definida como un conjunto de trastornos metabólicos que afectan diferentes órganos y tejidos, se caracteriza por un aumento de glucosa en la sangre. La causa principal es la disminución en la producción de insulina, segregada por el páncreas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce tres formas de diabetes: mellitus (tipo 1, tipo 2) y gestacional, la que ocurre durante el embarazo. Cada una tiene diferentes causas y distinta incidencia.
En la diabetes tipo 2, o de adultos, una causa probable es la deshidratación. Para conservar una cantidad adecuada de agua en la circulación y satisfacer las necesidades prioritarias del cerebro, la secreción de insulina se inhibe, lo que impide la entrada del líquido en las células del cuerpo. Solo algunas células obtienen suficiente agua para sobrevivir.
Beber agua puede revertir la diabetes tipo 2 en las etapas iniciales. No reconocer que la diabetes tipo 2 es una complicación por deshidratación, con el tiempo, puede causar daños masivos en las células sanguíneas de todo el cuerpo.
Existe un tipo de diabetes insípida, o “diabetes de agua”, que con frecuencia se confunde con la diabetes mellitus, pero son dos afecciones totalmente distintas. La diabetes insípida es una afección poco común del metabolismo del agua y tiene su origen en un trastorno hormonal centrado en la glándula pituitaria.
En este caso, los riñones son incapaces de conservar el agua, lo que provoca micción frecuente y sed pronunciada.
Como se puede observar, en el metabolismo el agua desempeña un papel esencial, por lo que proveer agua a las poblaciones es fundamental para mejorar la salud y la calidad de vida.
Con sabiduría, Tales de Mileto aseveró: “Sencillamente, el agua es el fundamento de la vida, porque la vida ha nacido en ella; es, pues, la base de todo lo vivo, es decir, es el principio de todo lo que existe”.
Darner A. Mora Alvarado es microbiólogo y salubrista público, director del Laboratorio Nacional de Aguas del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA).