La provincia colonial de Costa Rica procuró colocarse a la altura de las circunstancias políticas y sociales originadas en 1812, tras la aprobación de la Constitución Política de la monarquía española o comúnmente conocida como Constitución de Cádiz.
La norma fundamental era la primera de la historia española, americana y costarricense, y disponía en el artículo 366 la creación de centros educativos en pueblos y ciudades coloniales con el fin de fomentar la ilustración de los habitantes.
La pionera Casa de Enseñanza abrió sus puertas en abril de 1814 en San José, en una de las bodegas de la Factoría de Tabacos, donde actualmente queda la esquina noreste del Banco Central.
Bajo la guía del bachiller nicaragüense Rafael F. Osejo Escamilla, el centro de estudios superiores, además de la materia escolar y parte de la colegial, impartía cursos de índole profesional.
Después de ser derogada la Constitución de Cádiz, el obispo de Nicaragua y Costa Rica, Nicolás García J., asumió la regencia y la rebautizó como Casa de Enseñanza de Santo Tomás, en homenaje al teólogo escolástico medieval.
En 1824, el gobierno independiente de nuestro país retomó la guía de la institución, se instauró el Bachillerato en Leyes (1825) y se inauguró la primera cátedra de Derecho Civil, en 1830.
Tras 29 años, la Casa fue transformada por el jefe de Estado José M. Alfaro Z. y su ministro José M. Castro Madriz en la Universidad de Santo Tomás, decisión que se oficializó el 3 de mayo de 1843 —hace 180 años— y que dio origen a la carrera jurídica en Costa Rica, pues se promulgó la entonces llamada Licenciatura en Jurisprudencia, cuyos alumnos, emulando las prácticas estudiantiles medievales, llevaban una cinta roja a la izquierda del pecho.
La Facultad de Leyes y Ciencias Políticas fue fundada en 1849 y su primer rector fue el jurista Ramón Carranza R. En 1854, la carrera forense comenzó a impartirse.
No obstante, en 1888, la Universidad de Santo Tomás fue clausurada y quedó en funciones solamente la enseñanza jurídica, asignada a la nueva Escuela de Derecho, razón por la cual pasó a denominarse carrera de Derecho y su tutela fue ejercida por el Colegio de Abogados durante las siguientes cinco décadas.
En 1940 y tras los ingentes esfuerzos del presidente Rafael Ángel Calderón Guardia y su ministro Luis D. Tinoco, se fundó la Universidad de Costa Rica, con la Escuela de Derecho como uno de los principales artífices académicos.
El primer Consejo Universitario se instauró en la sede de la Escuela (actual I Circuito Judicial de San José) y su primer rector formal fue el Lic. Alejandro Alvarado Q. (expresidente del Colegio de Abogados), mientras que el primer decano fue el Lic. Gregorio Martín C.
Las lecciones comenzaron en marzo de 1941 con 155 alumnos en Derecho, de un total de 719 matriculados en general. El primer profesor fue el jurisconsulto Alberto Brenes Córdoba; Eduardo Martín V. y Virginia Martén P. fueron los primeros graduados.
La Escuela de Derecho obtuvo la categoría académica de Facultad de Derecho en 1952 y en 1960 se trasladó a la nueva sede en San Pedro, donde ocupaba en las mañanas el edificio de la Facultad de Ciencias Económicas hasta que en 1977 inauguró la propia (costado oeste del campus universitario), la cual fue ampliada y reinaugurada en el 2018.
Al celebrarse dieciocho décadas de existencia como la entidad académica más antigua del país, la Facultad de Derecho mantiene incólume su objetivo primordial: brindar a las nuevas generaciones de estudiantes el conocimiento del ámbito jurídico.
El autor es profesor en la Facultad de Derecho de la UCR.