“Crisis educativa”, “cambios urgentes” y “mayor inversión” pueden sonar a expresiones gastadas. Hemos pasado años discutiendo sobre lo mismo, con escasos resultados tangibles. ¿Y si, en lugar de buscar respuestas a esas frases recurrentes, nos planteamos preguntas diferentes? Si no estamos dispuestos a abrir el abanico de posibilidades, seguiremos sin avanzar hacia soluciones innovadoras y sostenibles
El futuro de la educación avanza a pasos agigantados en el mundo y la inteligencia artificial (IA) se está convirtiendo en una valiosa aliada de la educación.
Actualmente, existen escuelas que buscan reinventar el modelo tradicional desarrollando habilidades conocidas como “las 4 C”: comunicación, creatividad, pensamiento crítico y colaboración. Ofrecen modelos que se alejan de los convencionales, los cuales han cambiado poco en los últimos 100 años.
Gracias a la tecnología, pueden proporcionar a los estudiantes lo que necesitan, al ritmo que lo necesitan, y esto abre nuevas posibilidades para un aprendizaje más personalizado y efectivo.
En vez de pasar gran parte del día sentados en un escritorio, los estudiantes reciben planes de aprendizaje personalizados y autodirigidos, y dedican solo dos horas diarias a los estudios académicos.
Este bloque se divide en cuatro periodos de 25 minutos cada uno y se enfoca en las materias base: matemáticas, lectura, escritura y ciencias. Los estudiantes aprenden mediante aplicaciones que utilizan IA.
En Costa Rica, recomendaría incluir un bloque para el aprendizaje del inglés. Así, los alumnos podrían beneficiarse de modelos de pronunciación auténticos, similares a los de un hablante nativo, desde una edad temprana. Esto ayudaría a mitigar el problema de no contar con suficientes docentes certificados y a minimizar el tiempo y los recursos necesarios para capacitar a los docentes.
Las plataformas de aprendizaje
Las plataformas son sistemas híbridos que combinan aplicaciones comerciales de IA, como Khan Academy e IXL, con software desarrollado para lectura, escritura y matemáticas. Son capaces de ajustar la dificultad del plan de estudios según el rendimiento y ofrecer tutorías mediante algoritmos de aprendizaje adaptativo, lo que asegura un aprendizaje óptimo y personalizado. Dentro de un grupo de edad cronológica similar, uno puede estar aprendiendo los sonidos de las letras, mientras que otro puede estar leyendo capítulos de libros.
El sistema monitorea el progreso según el dominio de los conceptos antes de avanzar. Tiene la capacidad de detectar lagunas de conocimiento para ofrecer prácticas restaurativas, proporcionando corrección en tiempo real. Incluye paneles de visualización de datos para estudiantes, docentes y padres de familia, con lo que permite conocer en tiempo real los avances.
El modelo es atractivo para los estudiantes por sus elementos gamificados, y útil para los docentes al evaluar sistemáticamente. Los datos iniciales son prometedores, ya que los estudiantes aprenden más rápido y obtienen buenos resultados en pruebas estandarizadas.
El resto del día lo dedican al desarrollo de habilidades, como hablar en público y educación financiera. Los estudiantes lideran sus propios proyectos, en los que pueden integrar varias asignaturas a la vez. Al hacerlo, se rescata la exploración de fortalezas individuales, lo cual es fundamental para trazar una ruta de vida.
Este modelo no prescinde del docente, sino que transforma su rol. Hoy, un docente puede tener hasta 30 estudiantes, cada uno con necesidades diferentes. Debe encontrar a cada uno en su nivel de aprendizaje, brindarle justo lo que necesita y evaluar su desempeño. Además, debe cumplir con las tareas administrativas, como planificación y papeleo. Al liberar al docente para que actúe como guía, se aprovecha su capacidad de brindar apoyo emocional y motivación.
Al integrar la IA en la educación, podemos apoyar a los docentes y a los estudiantes, y, de esta forma, avanzar hacia un futuro donde la educación no solo sea más eficiente, sino también más inclusiva y satisfactoria para todos los involucrados.
msteuber@famcr.com
Marlene Steuber es consultora educativa.
