Importante aclarar a la opinión pública tres aspectos esenciales sobre lo citado en el artículo publicado en La Nación el 2 de abril del año en curso. En primer lugar, la Facultad de Educación de la Universidad de Costa Rica (UCR) nunca ha obstaculizado ni obstaculizará ninguna reforma sustantiva para la educación pública. En segundo lugar, la Resolución VD-R-8782, del 23 de febrero de 2012, emitida por la Vicerrectoría de Docencia (VD), es débil en su fundamento académico, legal y ético. En tercer lugar, la Resolución R-1709, emitida por la Rectoría, el 27 de marzo, sí es una resolución institucionalmente histórica. La Facultad de Educación y la Escuela de Formación Docente (EFD) son conscientes de la urgencia de realizar los cambios necesarios para reafirmar la formación integral y fortalecer un enfoque interdisciplinar en sus futuros graduados para que se enfrenten críticamente a las demandas del mundo actual, y asuman la profesión docente como un medio para promover el desarrollo humano y social.
De ahí que la Facultad diseñó el Plan Estratégico 2011-2015. Este plan tiene como propósito ofrecer propuestas académicas innovadoras consensuadas, acordes a las nuevas demandas educativas del mundo actual.
El Plan Estratégico se elaboró de manera participativa. En este proceso participó personal docente y administrativo, estudiantes; representantes de las vicerrectorías, del MEP, del Estado de la Educación, la Estrategia hacia el Siglo XXI, del SINAES, los gremios y otros. Entre los programas prioritarios está la autoevaluación permanente de las carreras, con miras al mejoramiento y a la acreditación. En el cual se obtuvieron logros importantes durante el 2011.
En el caso de las carreras de educación secundaria, que comparte responsabilidad, organización y cursos la EFD con trece escuelas de la UCR; la VD propuso, para el análisis, una ruta de trabajo. Esta labor se realizó, en un primer momento, en cada una de las diez comisiones compartidas responsables de la formación de docentes para las respectivas asignaturas de la educación secundaria, las cuales emitieron propuestas importantes para su reorganización. En un segundo momento, se realizaron reuniones con las unidades académicas y con la VD, y se firmaron los siguientes acuerdos, excepto con la Escuela de Matemática: 1. Autoevaluar las carreras para partir de los resultados de la investigación científica en el rediseño de los planes de estudio con miras al mejoramiento o a la acreditación, 2. Reestructurar y fortalecer las comisiones compartidas con el fin de asignarles un mayor nivel de autonomía y promuever una gestión ágil y 3. Adjudicar mayores recursos presupuestarios y humanos para el trabajo de estas comisiones, de manera que puedan desarrollar proyectos conjuntos y cumplir con lo firmado.
Por lo anterior, es lamentable que la Resolución VD-R-8782 carezca de fundamento científico-pedagógico, ignore las corrientes actuales en cuanto a la formación de docentes, creando cuatro modalidades distintas para la UCR, no promueva la interdisciplinaridad de manera generalizada, no refleje la mayoría de los acuerdos firmados por la entonces vicerrectora de Docencia y las unidades académicas, contenga vicios de nulidad de acuerdo con la normativa universitaria, no responda al modelo democrático y participativo de universidad que establece el Estatuto Orgánico de la UCR .
La Resolución VD-R-8782 debe ser analizada desde el punto de vista ético, académico y jurídico, por instancias internas y externas de la UCR (Oficina Jurídica, Colegio de Licenciados y Profesores, Colegio de Abogados, Defensoría de los Habitantes u otras), aspecto con el que coincido con el autor del artículo, que, a final de cuentas, demostrará que la rectora, Dra. Yamileth González García actuó de acuerdo con la normativa institucional y de manera oportuna. Para revertir cuanto antes esta situación, la EFD y la Facultad participarán con la Vicerrectoría de Docencia, junto con representantes de las otras unidades académicas, en la redacción de una resolución para las carreras de educación secundaria de la Institución, con el fin de ofrecer a la sociedad costarricense personal docente con una sólida formación pedagógica y disciplinar que contribuya al mejoramiento de la educación secundaria nacional. La Resolución R-1709, en consecuencia, sí es institucionalmente histórica porque evitó que se ejecutara la Resolución VD-R-8782 que violenta la normativa vigente de la Universidad de Costa Rica.