El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha demostrado, con un estudio sobre violencia en el país (diciembre del 2005) que la violencia real no es de la magnitud que la percibimos, sino menor; que la mayoría de los delitos son cometidos por costarricenses; que el lugar de mayor violencia es el hogar; que la mayoría de las llamadas recibidas por la Policía son de violencia doméstica contra las mujeres, y que el problema de la inseguridad se resuelve integralmente con educación, prevención, protección, participación y control, y no solo "con mano dura".
Según el PNUD, detener la inseguridad ciudadana es responsabilidad de todos: Gobierno, sector privado y ciudadanía, pero, para ello, las personas tenemos que contar con una serie de habilidades para vivir y convivir en sociedad como las que impulsa, desde hace unos años, la Organización Mundial de la Salud.
Experiencia dominicana. En criterio de la OMS, para prevenir las causas de la conducta violenta y de riesgo para la salud de la población juvenil y adolescente es pertinente el desarrollo de diez habilidades básicas: conocimiento de sí, comunicación efectiva, toma de decisiones, pensamiento creativo, manejo de emociones y sentimientos, empatía, relaciones interpersonales, solución de problemas, pensamiento crítico y manejo del estrés. Con esa línea propuesta, República Dominicana desarrolló un programa educativo en tres etapas (Preal, 2004), con objetivos específicos para cada una de ellas:
1. "Yo tengo V.A.L.O.R.": Vida ("mi vida está en mis manos"). Acción ("actúo con determinación"). Logro ("me pongo objetivos y los alcanzo"). Orgullo ("de ser quien soy"). Responsabilidad ("soy responsable de mis decisiones").
2. "Yo tengo C.O.N.T.R.O.L.": Comunico ("escucho y hablo con calma y serenidad"). Organizo ("ordeno mis ideas antes de expresarlas"). Negocio ("llego a un acuerdo en base a intereses claros y comunes"). Tolero ("respeto las opiniones y formas de actuar de los demás"). Razono ("analizo la situación y evalúo las opciones"). Ofrezco ("aporto alternativas de solución para que ganemos todos"). Logro ("alcanzamos compromisos realistas, viables y duraderos").
3. "Yo aprendo A V.I.V.I.R.": Autoestima ("aprecio mis cualidades y reconozco las de las otras personas"). Vida ("vivir es desarrollar capacidades y valores, tener sueños y salir a su encuentro"). Interés ("me intereso por cuanto me rodea y participo en el desarrollo de mi comunidad"). Valor ("cultivo los valores que me ayuden a vivir y convivir pacíficamente"). Integridad ("cumplo mis compromisos con rectitud y tomo decisiones responsables"). Respeto ("me respeto, respeto mi cuerpo y respeto a los demás").
Cambio de comportamiento. Bien podríamos intentar en el país el desarrollo de tales habilidades para promover estilos de vida saludables y sin violencia, con los cuales comience a cambiar nuestro comportamiento social en los diversos ámbitos y, sobre todo, en el seno de los hogares en contra de las mujeres, como hoy sucede mayoritariamente según el estudio del PNUD.
Por otro lado, es necesario promover la regulación de los programas televisivos, en aras de evitarle su exposición a contenidos violentos, discrimintarios o que inciten al vicio o al odio racial. Esto es particularmente importante si tomamos en cuenta que la Universidad de Costa Rica ha realizado un estudio, según el cual "algunas historias muestran conductas negativas cada dos minutos" y hay "un predominio de conductas agresivas en los 16 programas más vistos por escolares costarricenses, 14 de los cuales están hechos para niños" (La Nación, 21/4/06).