
Los expresidentes Laura Chinchilla y Miguel Ángel Rodríguez, junto a otras figuras de la política nacional, cuestionaron el cambio de postura de Costa Rica en la defensa de Ucrania. Señalaron que la abstención del país, en la votación de una moción contra la agresión rusa, supone un sacrificio de los valores históricos que han definido la política exterior costarricense.
Ambos exmandatarios externaron su malestar por medio de la red social X (antes Twitter).
“¡Qué vergüenza!”, publicó Chinchilla. La exmandataria afirmó que, hasta ahora, “los condicionantes se mantenían dentro de márgenes medianamente comprensibles”, como las tensiones comerciales con China por el 5G o la acogida de migrantes deportados por Estados Unidos, pero lo de Ucracia va más alla.
La expresidenta cuestionó que el país sacrificara los valores esenciales de su política exterior, que negara los hechos y el derecho internacional. “Así hasta Ortega vuelve a invadir Costa Rica”, agregó.
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La moción promovida por Ucrania en la Organización de Naciones Unidas (ONU) y respaldada por 53 países, incluida Costa Rica, reafirma el compromiso con la soberanía, independencia e integridad territorial de Ucrania, rechazando la adquisición de territorios por la fuerza. Además, denunciaba las graves consecuencias humanitarias y económicas del conflicto, instando a un cese inmediato de hostilidades y la retirada incondicional de las tropas rusas.
No obstante, cuando llegó el momento de la votación, la representación costarricense ante la ONU se abstuvo de participar.
Miguel Ángel Rodríguez, expresidente entre 1998 y 2002, también expresó su desacuerdo con la postura del gobierno de Chaves.
“Me duele profundamente que Costa Rica se abstenga de defender el principio de la integridad territorial de Ucrania. Eso es contrario a nuestro interés nacional como nación desarmada y quiebra con una política exterior ininterrumpida de defensa de la no agresión y el respeto a la integridad territorial de las naciones”, externó.
Eduardo Ulibarri, exembajador de Costa Rica ante la ONU (2010-2014), también expresó su malestar por medio de X. “Estamos perdiendo los principios y el rumbo en política exterior. Avergüenza y preocupa”, sentenció.
Juan Carlos Hidalgo, candidato presidencial del Partido Unidad Social Cristiano (PUSC), también calificó “vergüenza nacional” el accionar de Costa Rica.
“Cuando Nicaragua invadió isla Calero, apelamos a la comunidad internacional por el respeto a la integridad territorial de las naciones. Hoy hemos traicionado al pueblo ucraniano en la defensa de su existencia como nación ante la brutal guerra de agresión rusa. Una política exterior basada en valores y principios echada por la borda”, agregó.
El giro de Costa Rica coincide con la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, quien ha dejado de priorizar el respaldo a Ucrania y, ahora, presiona por un acuerdo de paz negociado directamente con Rusia, sin la participación ucraniana.
Trump ha planteado que Ucrania debería retribuir el apoyo económico y militar recibido durante la administración de Joe Biden, ofreciendo a Estados Unidos el control sobre sus tierras raras y minerales.