Los diputados de oposición criticaron al gobierno por incumplir las metas fiscales acordadas en la ley de eurobonos y presentar, ahora, un proyecto de ley para suavizar los objetivos del 2024 y 2025 en cuanto a superávit primario y pago de intereses de la deuda pública.
Las criticas surgieron durante una mesa de trabajo efectuada en la Comisión de Asuntos Hacendarios, en donde se analizar el proyecto de modificación (expediente 24462).
El legislador del Partido Liberal Progresista (PLP), Eliécer Feinzaig Mintz, explicó que, cuando se aprobaron los eurobonos, se exigió el cumplimiento de ciertos parámetros a cambio de que el gobierno pudiese endeudarse en el mercado internacional mediante la emisión de eurobonos.
“Nos están diciendo en la cara ‘no vamos a cumplir, y no solo no vamos a cumplir, sino que ahora los queremos a ustedes de cómplices cambiando los parámetros que se habían establecido desde el principio’. Yo no entiendo esta discusión política. Técnicamente está clarísimo. Este es un proyecto de ley que debería ser rechazado”, aseveró Feinzaig.
¿Qué sentido tiene ahora decir, ‘ah no, el gobierno no cumplió con los requisitos, entonces cambiemos la ley', si los requisitos eran para garantizar el buen comportamiento fiscal del Gobierno?
— Eliécer Feinzaig
Agregó que el gobierno presentó un presupuesto incompleto para el 2025, el cual oculta que el superávit del próximo año podría ser mayor a lo previsto.
Gilbert Jiménez Siles, del Partido Liberación Nacional (PLN), dijo que es importante saber por qué no se pudieron cumplir las metas, mientras que Carlos Felipe García Molina, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), lamentó que el gobierno argumentara en el 2022 que el país sufriría una caída si no se aprobaban los eurobonos, pero ahora los posterga.
La ley de eurobonos autorizó una colocación de $5.000 millones en tractos. El gobierno propuso aplazar las dos últimas emisiones, de $1.000 millones cada una, trasladando la de este año al 2025 y la del 2025 al 2026.
En cuanto a las metas, pidió bajar el superávit primario del 1,85% del producto interno bruto (PIB) al 1,3% para este año, y de un 2,25% a un 1,85% el del 2025. Este indicador es el saldo positivo al comparar los ingresos frente a los gastos, pero sin tomar en cuenta el dinero que se va en intereses de la deuda.
Asimismo, el gobierno había prometido que el pago de intereses en el 2024 no superaría el 4,9% del PIB, pero ahora solicita elevarlo al 5,1%. Para el 2025, la meta original también pasaróa de un 4,6% a un 5%.
Las promesas no están escritas en piedra, dice Cisneros
Ante las críticas de los legisladores, la diputada oficialista Pilar Cisneros, del Partido Progreso Social Democrático (PPSD), defendió las medidas solicitadas por el Ejecutivo, argumentando que son necesarias debido a la caída en los ingresos fiscales. Cisneros destacó los ¢80.000 millones que, según asegura, se dejaron de percibir tras la rebaja en el pago del marchamo.
“Las promesas no están escritas en piedra, ni las circunstancias están escritas en piedra. Ustedes mismos han sido testigos de la cantidad de recursos que se le han quitado al Poder Ejecutivo, cómo se le han reducido los ingresos al fisco. Don Eliécer Feinzaig insiste una y otra vez, y ya pedí la certificación de la Contraloría de cuánto significó la rebaja en el valor del marchamo”, dijo Cisneros.
La diputada ofreció la intervención del ministro de Hacienda, Nogui Acosta, para aclarar los detalles. Sin embargo, los diputados rechazaron esta propuesta y continuaron el debate.
La comisión suspendió la sesión por el inicio del plenario legislativo, programando la reanudación de la discusión para el miércoles 13 de noviembre.