El Ministerio de Educación Pública (MEP) comunicó que existe un faltante de ¢100.000 millones para pagar salarios de docentes en el Presupuesto Nacional del 2025, así como otro déficit de ¢18.000 millones para cubrir la operación de comedores escolares.
Una situación similar ocurre para este 2024. Al Ministerio le faltan ¢37.000 millones para cubrir los sueldos de los últimos meses, pero el gobierno solo le asignó ¢20.000 millones adicionales en el VI presupuesto extraordinario que acaba de presentar al Congreso.
Así lo expuso la contralora general de la República, Marta Acosta, este miércoles, ante los diputados de la Comisión de Asuntos Hacendarios que estudia el plan de gastos presentado por el gobierno. La jerarca expuso que recibió una nota oficial del MEP indicando los faltantes.
Según la contralora, esta situación despierta una gran incertidumbre porque la formulación de los presupuestos debe ser un ejercicio que refleje la realidad económica y la eventual existencia de faltantes en materia de gastos.
La presidenta del foro legislativo, la diputada Paulina Ramírez, fustigó al gobierno del presidente Rodrigo Chaves por remitir al Congreso un plan de gastos incompleto y trasladar a los legisladores la responsabilidad de cubrir los faltantes, cuando la presupuestación es una obligación del Poder Ejecutivo.
“Quien formula el presupuesto y define prioridades es el Gobierno, no le corresponde a esta Asamblea Legislativa. Podemos hacer pesos y contrapesos ante la ausencia de las decisiones que pueda tomar el Ejecutivo, pero no es responsabilidad de nosotros”, externó con molestia la vocera del Partido Liberación Nacional (PLN).
En el mismo sentido se manifestó Jonathan Acuña, diputado del Frente Amplio. “El gobierno de Rodrigo Chaves envió el presupuesto de Educación, sabiendo que le faltan ¢118.000 millones”, protestó.
El parlamentario cuestionó que el MEP diera a conocer el monto que hace falta para cubrir las remuneraciones de los últimos tres meses del 2024, un mes después de que el Poder Ejecutivo presentó a la Asamblea Legislativa el proyecto del Presupuesto Nacional. El ministro de Hacienda, Nogui Acosta, envió el plan de gastos el pasado 30 de agosto.
Si bien la ministra de Educación, Anna Katharina Müller, reconoció ante el mismo foro legislativo, el pasado 17 de setiembre, que no contaban con los recursos necesarios para cubrir salarios y aguinaldos en lo que resta del año, fue incapaz de precisar la cifra exacta del faltante, cuando Acuña le hizo la pregunta.
“Es una irresponsabilidad evidente, presupuestaria, pero además en cumplimiento de derechos en el sector educación. No hay manera de que esto tenga una explicación racional de que nos hayan dicho, ‘miren, todavía es que no sabemos cuánto nos falta’. Es que no debió llegar nunca un presupuesto para Educación al que le falte algo”, criticó Acuña.
El faltante del 2025 se suma al hecho de que, para ese año, el gobierno asignó al MEP el menor presupuesto de los últimos 10 años, en relación con el producto interno bruto (PIB).
En el 2020, el Ministerio de Educación recibió el 7,3% del PIB, un porcentaje cercano al 8% que, según la Constitución Política, debe destinarse a la educación. Sin embargo, desde entonces, este porcentaje ha disminuido hasta bajar ahora a solo el 4,9%.