Las fracciones de los partidos Unidad Social Cristiana (PUSC) y Frente Amplio (FA) solicitaron acelerar la aprobación de un crédito de $160 millones con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), para que los recursos se utilicen en atender la emergencia que vive el país por los fuertes aguaceros provocados por la zona de convergencia intertropical y el impacto indirecto de la tormenta tropical Sara.
Nogui Acosta, ministro de Hacienda, confirmó a La Nación, este sábado, que el gobierno solicitará activar el préstamo, una vez que se convierta en ley de la República. “Por eso es la llamada a los diputados, para que lo aprueben a la brevedad posible”, añadió.
No obstante, las fracciones políticas aclararon que no han recibido una solicitud formal por parte del Poder Ejecutivo para que se priorice la discusión del financiamiento internacional.
Las fracciones de los partidos Nueva República (PNR) y Liberal Progresista (PLP) también destacaron la importancia del empréstito y su voluntad de colaborar en hacer más célere su discusión. La iniciativa ya se encuentra en el plenario, tras recibir un dictamen afirmativo el pasado 30 de octubre, por parte de la Comisión de Hacendarios de la Asamblea Legislativa.
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En el caso del Partido Liberación Nacional (PLN), no se obtuvo respuesta a la consulta planteada por este medio.
La bancada socialcristiana anunció que promoverá, la próxima semana, la aprobación prioritaria del expediente 24.264, mediante el cual se tramita el contrato del Préstamo de Políticas de Desarrollo de la Gestión del Riesgo de Desastres con Opción de Desembolso Diferido ante Catástrofes (Cat DDO, por sus siglas en inglés).
María Marta Carballo, jefa de fracción del PUSC, afirmó que el crédito permitirá incrementar los recursos del Fondo Nacional de Emergencias y así dar una respuesta más efectiva a las zonas afectadas por las condiciones climáticas que han golpeado al país en las últimas semanas.
Jonathan Acuña, del FA, se pronunció en la misma línea. Según el diputado, su agrupación también hizo un llamado al resto de las bancadas para agilizar la aprobación del financiamiento internacional.
A diferencia de otros préstamos, el desembolso de los recursos depende de la existencia de una declaratoria de emergencia, por eventos relacionados con desastres o producto de situaciones que afecten la salud pública (como la pandemia por la covid-19).
Desde el 13 de noviembre, el país se encuentra en estado de emergencia nacional por la fuerte caída de precipitaciones que provocaron inundaciones, deslizamientos y el desplazamiento de 3.057 personas a albergues temporales.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) será la encargada de gestionar los recursos provenientes del empréstito.
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Gobierno no ha formalizado solicitud
Pablo Sibaja, jefe de fracción del PNR, destacó la importancia de contar con los fondos del BIRF, ya que servirán como un seguro para hacer frente a catástrofes nacionales. Sin embargo, aclaró que “el Poder Ejecutivo no ha manifestado la voluntad de darle dispensa de trámite (al empréstito)”.
Igualmente, el PUSC confirmó, por medio de su encargado de prensa, que no se recibió una gestión por parte de Zapote y que la propuesta de finiquitar lo más pronto posible el trámite del proyecto de ley surgió a partir de una revisión con los diputados socialcristianos de la Comisión de Hacendarios, sobre posibles fuentes de recursos para aportar a la emergencia.
La diputada Pilar Cisneros, jefa del oficialista Partido Progreso Social Democrático (PPSD), dijo desconocer si el gobierno remitió una comunicación a las bancadas políticas, sobre el tema y pidió dirigir la consulta a la ministra de la Presidencia, Laura Fernández. “Lo hemos hablado, pero no sé si procedió”, declaró la legisladora.
Al respecto, Fernández dijo a La Nación que debía revisar si se envió un oficio desde su despacho o el Ministerio de Hacienda, con la petitoria. No obstante, mencionó que el presidente Rodrigo Chaves hizo la solicitud a los diputados durante sus intervenciones públicas de la semana anterior, relacionadas con la emergencia que atraviesa el país.
“Déjeme corroborar si hay un oficio más formal de lo que pueda ser una indicación del presidente. No sé qué más formal que un llamado del mismo presidente”, alegó la jerarca.
Por su parte, Acosta señaló que la ministra de la Presidencia se comunicará el lunes con los legisladores.
Es la segunda vez que el país recibe un Cat DDO del Banco Mundial. El primer préstamo en esta modalidad que obtuvo Costa Rica fue por $65 millones; su aprobación se dio en el 2008 y fue cerrado en el 2017.
Según Acosta, $25,3 millones se emplearon para atender el terremoto de Cinchona (2009); $8.7 millones se destinaron a la emergencia provocada por la tormenta tropical Nicole (2010) y los restantes $31 millones fueron dirigidos a la atención de los embates provocados por el huracán Otto (2016).
En conjunto, el BIRF y la Asociación Internacional de Fomento (AIF) constituyen el Banco Mundial.