La Selección de Costa Rica hace su trabajo y lo hace bien. Lo hace de acuerdo al rival que tiene al frente, adversario débil, que ya se sabía, iba a ser así, por lo que mostró en el choque de ida, el viernes de la semana pasada.
Al terminar el primer tiempo, la Tricolor gana 4-0, en el global 11-0. Alejandro Bran, Alonso Martínez y Manfred Ugalde sacudieron las redes, el primero fue un autogol de Euigene Martínez, apenas a los 54 segundos del partido.
Miguel Herrera, técnico de la Selección Nacional, pidió goles y los jugadores están cumpliendo. Lo importante en este compromiso ante un flojo adversario, es que la escuadra tica no baja la guardia, no se conforma y busca más. La pregunta es cuánto más aumentará el marcador.
La anotación de Alejandro Bran fue con un remate fuera del área en el minuto 5, el tercer tanto fue de Alonso Martínez, también con un derechazo y el cuarto llegó con un cabezazo de Manfred Ugalde.
Una de las acciones más llamativas, fue cuando al minuto31, Jeyland Mitchell dejó en evidencia su potencia y velocidad para cortar una incursión peligrosa de Bernárdez. Mitchell corrió y alcanzó al rival, que cuando iba a disparar, el zaguero tico lo trabó a tiempo.
De momento es bueno el accionar de la Tricolor y lo único malo, la lesión de Gerald Taylor, quien al minuto 28 no pudo continuar. En un mano a mano, un jugador de Belice le cayó encima y debió darle su lugar a Carlos Mora. Gerald se marchó desconsolado, llorando por una nueva lesión.