Ciudad de Guatemala. Con un juego fiel a su estilo, la Tricolor retomó anoche el camino del triunfo y derrotó a El Salvador con un contundente 3 a 0, en el futbol de los VII Juegos Centroamericanos.
Con ello, la Selección preolímpica de Costa Rica se clasificó a la segunda ronda, tras sufrir y caer vencida en el debut ante Panamá, 1 a 0 el sábado anterior.
Anoche, los pupilos de Carlos Watson volvieron a su juego en corto, fácil y de resultados, aunque todavía el funcionamiento no es el mismo que desplegó en el recién pasado Mundial Juvenil de Argentina.
Mejoría
La mejora fue evidente desde el arranque, porque apenas a los siete minutos Erick Scott abrió la pizarra, que luego amplió Warren Granados (50í) y cerró Luis Vallejos (74í).
Con este resultado, El Salvador quedó fuera del torneo, pues perdió con Panamá 2 a 0 y observó cómo su joven equipo fue superado por una Costa Rica con más oficio.
Balón al pie, despliegues por los costados y sorpresa con Granados como volante de llegada, constituyeron los elementos que explicaron el cambio con respecto a la derrota ante los canaleros.
Ayer, Watson incluyó desde la partida a Vallejos en sustitución de Pablo Salazar, quien reforzó la media cancha, mientras Cristian Montero bajó en defensiva.
Esto le permitió a Granados unirse a Scoot y Winston Parks para sumar tres delanteros en función de ataque, o sea, en aquellas jugadas que Costa Rica tenía el balón dominado y se encarrilaba al marco contrario.
La variante táctica sorprendió al técnico salvadoreño Carlos Recinos, quien durante todo el partido no atinó a realizar variantes que paliaran el fuerte control ejercido por la Tricolor.
Al minuto 19, Recinos vio comprometida aún más su labor tras la salida, con fractura de tibia, del volante central Helman Monterrosa, quien daba cierta tranquilidad ante los constantes avances ticos.
Difícil
Pero donde se le puso más difícil el partido fue al minuto 33, ya que el lateral derecho Reyes Lemus fue expulsado por el árbitro guatemalteco Freddy Burgos, tras golpear a Michael Robinson.
El resultado y la clasificación dan la razón a Waston de que el equipo necesitaba ritmo para no repetir el triste espectáculo ante los canaleros.
La cancha del Mateo Flores mucho mejor que la del Ejército contribuyó a que la Tricolor se observara diferente, pero aún exhibió algunos defectos a los que el técnico debe darles atención inmediata.
El de más bulto es la baja forma del delantero Winston Parks, quien parece lejos del grupo en ese departamento y no encuentra la forma de descollar como lo ha hecho en el pasado.
También la parte media, que si bien ayer mostró grandes avances, debe sufrir ajustes para hacerla más segura y expedita, con mayor movilidad y en procura siempre de la habilitación inteligente.
Costa Rica volvió a su camino habitual en la historia de los Juegos Centroamericanos. Ahora lo que requiere no solo es mantener ese nivel, sino mejorarlo, pues los rivales en la segunda fase serán más complicados.