El perdón a Rojas tiene efecto inmediato, anunció la FIFA, organismo que tuvo en cuenta la mediación que sobre esta cuestión ejerció la Unión de Futbolistas de Chile.
Rojas, quien en la actualidad desempeña labores de entrenador en Sao Paulo (Brasil), fue sancionado a perpetuidad tras simular una lesión por un supuesto impacto de una bengala arrojado en el área pequeña durante el citado encuentro entre las selecciones de Brasil y Chile en el estadio de Maracaná.
El guardameta chileno fue atendido por los auxiliares del combinado chileno en el área pequeña, para abandonar poco después el terreno de juego con un corte en la ceja, del que manaba abundante sangre.
Las posteriores investigaciones sobre el suceso revelaron que Rojas se lesionó deliberadamente, en el momento en el que Brasil ganaba por 1-0.
La FIFA sancionó de por vida a Rojas, así como al seleccionador Orlando Aravena y al doctor del equipo Daniel Rodríguez.