Allá en Turrialba, Carlos Solano dio sus primeras patadas y comenzó su eterna amistad con el gol.
Con la Asociación Deportiva Turrialbeña fue goleador en Segunda División y ganó el boleto a Primera en 1968.
Jugó un año con el equipo azucarero, antes de pasar al Deportivo Saprissa en 1970. Con los morados ganó cinco campeonatos, tres títulos del istmo y fue goleador nacional en 1976.
Pasó luego al Cartaginés y se marchó a Honduras para jugar con el Real España y el Olimpia. Allá ganó otro título y fue campeón goleador.
También militó en el Suchitepequez de Guatemala y regresó a Costa Rica en 1986, para jugar con Ramonense y terminar su carrera, un año después, como jugador y técnico de Sagrada Familia.
Como seleccionado participó en tres eliminatorias mundialistas y dos Juegos Panamericanos. Además, es uno de los pocos jugadores que ha metido cinco goles en un solo partido en la Primera.
Desde su retiro Carlos administra una tienda deportiva en Siquirres y una fábrica de confección de uniformes deportivos.
Se graduó como técnico en la Universidad Nacional y dirigió a varios equipos de Segunda División.
A sus 52 años, este vecino de Cuatro Reinas de Tibás, esposo, padre y abuelo, aún mantiene activo su característico olfato goleador, con el equipo máster del Saprissa.
Por el futbol conocí muchos lugares y aprendí a apreciar a las personas. Fui privilegiado”
Carlos Solano Fernández
Exfutbolista nacional