Para John Edmond Clarke, el beisbol es como una manía. Lo aprendió desde pequeño en su natal Barrio Cuba de Limón, disfrutó en la cancha como jugador y manager y ahora, lo dejó como una herencia para sus cuatro hijos.
Para John Edmond Clarke, el beisbol es como una manía. Lo aprendió desde pequeño en su natal Barrio Cuba de Limón, disfrutó en la cancha como jugador y manager y ahora, lo dejó como una herencia para sus cuatro hijos.
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