El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, declaró sentirse “árabe, gay y trabajador migrante”, este sábado en Doha en una multitudinaria conferencia de prensa en la víspera de la apertura del Mundial de Qatar, en la que criticó la “hipocresía” y las “lecciones de moral” de los países occidentales.
Su comparecencia fue ante 500 periodistas.
“Hoy me siento catarí, hoy me siento árabe, hoy me siento africano, hoy me siento gay, hoy me siento discapacitado, hoy me siento un trabajador migrante”, dijo el italo-suizo al principio de su discurso, que duró una hora exacta, en el que también denunció las lecciones de “doble moral” recibidas en las últimas semanas.
‘Como niño fui discriminado’
“Esto me recuerda mi historia personal porque soy hijo de trabajadores migrantes. Sé lo que quiere decir ser discriminado, ser acosado como extranjero. Como niño fui discriminado (en Suiza) porque era pelirrojo, porque tenía pecas, era italiano, hablaba mal el alemán”, continuó, mostrándose muy serio a solo 24 horas de la gran fiesta del fútbol mundial.
“Lo que pasa en este momento es profundamente injusto”, afirmó en el espectacular anfiteatro del centro de prensa del Mundial.
“Las críticas por el Mundial son hipócritas. Por lo que los europeos hemos hecho durante los últimos 3.000 años deberíamos estar pidiendo perdón los próximos 3.000 antes de dar lecciones de moral a los otros. Estas lecciones de moral son simplemente hipocresía”, insistió antes de responder a las preguntas de los reporteros.
El dirigente recordó los artículos aparecidos en España, Inglaterra o Francia en los que se describía a aficionados asiáticos como “falsos hinchas” por apoyar a las grandes potencias en los días previos al Mundial.
“Esto es racismo puro, cada uno en el mundo tiene el derecho de apoyar al equipo que quiera”, dijo.
‘¿Por qué nadie reconoce el progreso?’
Las autoridades de Qatar están en el punto de mira por organizaciones internacionales por el trato a cientos de miles de trabajadores llegados principalmente de Asia para levantar las infraestructuras del Mundial.
Infantino defendió que la FIFA ha sido uno de los pocos actores en preocuparse por las condiciones de trabajo.
“Entre las grandes empresas que ganan miles de millones en Qatar, ¿cuántas se han preocupado por la suerte de los trabajadores migrantes? Ninguna, porque un cambio en la legislación quiere decir menos ingresos. Nosotros lo hemos hecho”, señaló. “¿Por qué nadie reconoce este progreso?”.
Lanzó una pregunta al aire: ¿Cuántas empresas europeas ganan dinero aquí o en otros países de la zona y se han preocupado de los trabajadores?
De inmediato él mismo se respondió de forma enérgica: “Ninguna”.
“Igual ganaban menos si lo hacían. Nosotros, sí. Aquí defiendo el fútbol y las injusticias. La FIFA se preocupa y Qatar, también. ¿Saben cuántos periodistas vinieron a un acto sobre discapacitados hace dos días? Cuatro”.
Infantino recalcó una y otra vez que Qatar ha progresado y hablarán de ello, como también espera que se hable de fútbol.
“La FIFA está orgullosa de estar aquí. Me cansa leer comentarios sobre gente y decisiones de hace doce años. Va a ser el mejor Mundial. La gente lo que quiere es el fútbol”.
Aunque a homosexualidad es ilegal en ese país del Golfo, los organizadores de la Copa del Mundo han tratado de calmar la situación asegurando que las parejas homosexuales no serán molestadas durante el torneo.
Sobre los derechos LGBTQ+ el dirigente aseguró que las autoridades cataríes habían dado la garantía de que “todo el mundo será bienvenido” durante el torneo.
“He hablado mucho con los dirigentes y se da la bienvenida a todo el mundo. La opinión de uno o dos no es la de un país. Esto es un requisito que se va a cumplir. Las nomas existen, como pasó en Suiza en el 54. ¿Nos quedamos en casa y criticamos a los árabes porque no permiten a los gay en público? No, hay que pasar por un proceso. Las puertas se están empezando a abrir. Pido que intentemos unir, no es una guerra. La ciudad es preciosa y la gente está feliz”.
‘Tres horas sin cerveza’
El viernes las autoridades el emirato anunciaron que la venta de cerveza estará prohibida en las inmediaciones de los estadios, a diferencia de lo que se había afirmado hace dos meses.
“Pienso personalmente que se puede sobrevivir sin beber cerveza durante tres horas, lo que ya ocurre en Francia, España y en Escocia”, afirmó.
La cerveza seguirá estando disponible en los palcos VIP de los estadios, en las ‘Fan Zones’ (lugares para reunirse y seguir los partidos) y en algunos bares de hoteles y restaurantes.
“Todas las decisiones que se toman se adoptan de forma conjunta por la FIFA y la organización. Hay muchos puntos en dónde se podrá beber alcohol. Creo, de todas formas, que se puede pasar tres horas si beber cerveza, pero al ser un país árabe parece que es un problemón. En Fancia, España y algún país más ya pasa lo mismo. Budweiser es uno de los socios de la FIFA y vamos a seguir con ellos hasta 2026. Ojalá todos los problemas del Mundial sean el de la cerveza”.
Finalmente, Infantino expresó que ojalá dejen que la gente disfrute del Mundial.
“Si quieren, me pueden crucificar, pero dejen al fútbol, a los futbolistas. Intentemos unir, no crear conflictos. Celebremos el Mundial y espero que la gente pueda reír. Los gays son bienvenidos en Qatar. Es un proceso y nos olvidamos lo que hemos vivido. No somos Naciones Unidas, pero tenemos la pelota, el balón. Mujeres en Irán, trabajadores... si están un poco mejor, asumo las críticas”.
El Mundial empezará este domingo. El juego inaugural entre Qatar y Ecuador está pactado para las 10 a. m. (hora de Costa Rica), en el Estadio Al Khor.