Al terminar el partido entre Argentina y Países Bajos, Lionel Messi, capitán de la selección albiceleste, tuvo un encontronazo y no escondió su molestia.
Messi se preparaba para ser entrevistado por Gastón Edul, periodista del Canal TyC Sports de Argentina, cuando clavó la mirada hacia otro sector y de inmediato empezó a decir: “Qué mirás bobo”.
La reacción del jugador sorprendió al periodista, quien con unas palmadas buscó calmar al astro, quien pese a la clasificación de su equipo a semifinales, donde se medirá a Croacia, se notaba molesto.
Al principio surgió la duda sobre a quién iban dirigidas las palabras de Messi, pero una nota del Periódico La Nación de Argentina reveló la identidad de la persona que recibió el “bobo” por parte de Messi.
Testigos de la escena dentro del estadio Lusail relataron que el destinatario era ni más ni menos que Wout Weghorst, el delantero holandés que entró en el minuto 78 del partido y marcó los dos goles de su equipo, según informó La Nación de Argentina.
“Weghorst después de hacer el gol del empate se la pasó provocando a Messi, golpeándolo y buscando su reacción”, comentaron fuentes del plantel argentino. Messi le había contado a Sergio “Kun” Agüero -que bajó a festejar el triunfo por penales, pero tenía bronca con el delantero que juega en la Superliga de Turquía.
Lo insólito de la situación es que, pasados los festejos, la bronca y el desahogo, Weghorst se acercó a Messi para pedirle intercambiar la camiseta. El capitán argentino reaccionó intempestivamente cuando vio al holandés acercarse con su camiseta naranja en la mano. “Metétela en el orto”, le gritó, según relató el periodista español Ricardo Inclán, de la Cadena Cope, testigo de la escena. Justo en ese instante empezó la conexión con TyC Sports y Messi seguía con la bronca: “¿Qué mirás, bobo?”, insistió.
¿Quién es Weghorst?
Wout Weghorst, de 30 años, es un delantero con estatura de basquetbolista (1.97 centímetros), que entró a la lista holandesa en el último suspiro.
Tuvo una carrera discreta en clubes menores de su país, Emmen, Heracles Almelo, AZ Alkmaar, hasta que pasó a la Bundesliga alemana. Allí pasó sus mejores años con la camiseta del Wolfsburgo.
En 2021 parecía haber llegado su declive cuando fichó por el Burnley, de la Premier League. Le fue mal y de allí pasó al Besiktas turco, en lo que parecía el inicio de su ocaso. Van Gaal le dio una oportunidad inesperada al llevarlo al Mundial y este viernes pudo haberse convertido en héroe, al marcar dos goles después de entrar al partido de cuartos de final en los últimos minutos.
Al final, Messi siempre conversó con la prensa, dio algunas declaraciones y se mostró emocionado por el pase, sufrido como reconoció, pero Argentina en penales dejó en el camino a Países Bajos.
“Tuvimos que sufrir, pero pasamos y es algo lindo, impresionante”, añadió a las cámaras de la televisión de su país.
Messi destacó que: “Argentina demuestra partido a partido que sabe jugar cada juego con la misma intensidad y ganas. Quiere ser protagonista, es un equipo que entiende los momentos del partido, que juega cuando hay que jugar y cuando no, corre. Estamos ilusionados, con muchas ganas, necesitábamos esta alegría, para nosotros y para la gente que nos acompaña siempre”.