Los accionistas minoritarios del Saprissa esperan que en la asamblea del conjunto morado se hable con claridad, sobre la situación financiera del club.
Luego de que La Nación publicara que las deudas eran el mal crónico para los tibaseños, tres socios del club señalaron que cada vez es más necesaria la reunión con Horizonte Morado para analizar lo que está sucediendo con el plantel.
“Al no darse información oficial de manera oportuna hay muchísimas dudas y han salido muchísimos datos, sobre todo por La Nación . Ahora la próxima asamblea genera un mayor interés, y pese a que Horizonte Morado domina la actividad, sí se debe poner atención a lo que sacan los medios porque no hay buena imagen sobre lo que está sucediendo, es un tema de análisis para ellos”, afirmó el expresidente, Bernardo Méndez.
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El exjerarca enfatizó en que a él le llama la atención la relación entre lo que factura la S y la necesidad de conseguir refinanciamientos, como se dio en 2014 con un préstamo que se le solicitó a Bansol (hoy banco Prival) para saldar deudas con la Seguridad Social.
“Se informó que Saprissa estaba facturando $10 millones. Si es así, ahí hay algo que no calza; ¿por qué Saprissa se endeuda de nuevo si hay grandes ingresos? Creo que esto se debe discutir y analizar”.
Orlando Aguilar Wallen, otro accionista minoritario, expresó que el tema que más lo inquieta es cómo será el manejo de la pérdida acumulada y las deudas a largo plazo con entidades financieras.
“Después de ver los números, a uno la duda que le queda es: ¿qué pasaría si Saprissa no tuviera a Edgar Zurcher, representante de Promerica, entre sus accionistas? Porque la gran ventaja de Juan Carlos Rojas (presidente de Saprissa) es que tiene a Promerica; si fuera el Banco Nacional o el de Costa Rica ellos estarían con una posición diferente, pero al tratarse de bancos privados y que son amigos es más fácil buscar un refinanciamiento, ¿pero si él no estuviera?”, cuestionó.
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Aguilar fue más allá y fue claro en su reclamo.
“Si Saprissa tiene tantas deudas es porque no reduce gastos en la parte administrativa; me parece que tienen que valorar eso. Saprissa debería pensar en cambiar el presidente”, sentenció.
Miguel Agüero, quien también pertenece a los minoritarios, expresó que su duda gira en torno a la valoración de la marca ‘Saprissa’, la cual pasó en 2013 de ¢18.120. a ¢4.216 millones.
Un punto en el que coincidieron los tres accionistas es que no es buena señal que Alberto Raven, Marco Cercone y Sergio Egloff abandonaran la junta directiva saprissista, por diferencias, hace un año.
El jerarca morado, Juan Carlos Rojas, respondió en entrevista con este diario el jueves y el lunes que no tendría problema en responder a las preguntas de los accionistas en la asamblea.