Bryan Ruiz, Leonel Moreira, Alex López, Johan Venegas, Barlon Sequeira y Marcel Hernández no estarán en Estados Unidos, pero desde Costa Rica ellos juegan su propio partido.
La voz del capitán y de los demás es importante para que quienes protagonizarán el pulso decisivo de este martes contra Atlanta United (4 p. m.), en los octavos de final de la Liga de Campeones de Concacaf, se terminen de convencer que tienen mucha capacidad y que confían en que lo harán bien.
Pese a las carreras de la Liga y las gestiones entre domingo y lunes, no se consiguió la excepción para que quienes fueron a los amistosos en Europa pudieran ingresar territorio estadounidense.
El presidente rojinegro Fernando Ocampo explicó que el consulado le indicó que la gestión no la podía tramitar el club, sino que le tocaba a la Concacaf, pero la confederación señalaba que era mediante el Comité Olímpico.
Mientras la dirigencia estaba en medio de ese ping pong, en el plano deportivo, Andrés Carevic procuraba que los jugadores en Atlanta no fueran parte del estrés y se concentraran en lo suyo.
No es un reto sencillo para quienes están proyectados como la Liga del futuro. Los manudos no venden falsas expectativas, pero a lo interno del grupo están decididos a hacer posible lo que muchos ven imposible.
Más allá de que tienen un gol en contra, lo que los cachorros piensan es que lo que necesitan es ganar y qué mejor que hacerlo contra un equipo de mucho nivel, tanto que disimula muy bien que aún no arranca competencia en la MLS.
El panorama. La Liga tiene 16 jugadores para este encuentro, con un solo portero disponible, que es Mauricio Vargas.
Como defensas cuenta con José Salvatierra, Ian Lawrence, Fernán Faerron, José Miguel Cubero, Daniel Arreola, Alexis Gamboa, Yurguin Román y Junior Díaz. A ellos se les unió Santiago van der Putten, quien llegó ayer a Atlanta.
De los zagueros saldrá el hombre que tendrá la misión de ser el arquero suplente. Al parecer, Díaz será el elegido para eso.
Los volantes son Bernald Alfaro, Brandon Aguilera, Aarón Suárez y Geancarlo Castro.
En ataque, Alajuelense presenta a Alonso Martínez y Jurguens Montenegro.
No es lo que los rojinegros querían, porque anhelaban tener a su equipo casi completo, pero en medio de las circunstancias, Carevic siente tranquilidad porque esos jugadores disponibles han sumado minutos y se tienen confianza.
“A pesar de ser un plantel corto todos nuestros jugadores han tenido muchos minutos y eso es muy importante en esta instancia de lo que ha pasado, de tener a los jugadores con ritmo y además de tenerlos con ritmo, lo han hecho muy bien cuando les ha tocado jugar a todos. Eso es la tranquilidad del cuerpo técnico y entonces esperemos reflejarlo este martes en el partido”, respondió el técnico argentino a La Nación.
José Andrés Salvatierra confesó que desde antes de que surgiera el inconveniente con los seleccionados, porque lo manejaban desde que estaban haciendo los esfuerzos por obtener las visas pendientes, lo que se decían entre ellos es que “el jugador que esté en Liga Deportiva Alajuelense tiene que estar siempre al 100%, porque en cualquier momento le va a toca la oportunidad de jugar y debe mantener el nivel que tiene el equipo”.
Indicó que partiendo de eso, todos están habituados al estilo de Carevic y por eso todo lo planeado se mantiene.
“No se va a cambiar, se va a mantener la idea que el cuerpo técnico tiene pensada con la que se puede hacer daño y salir a la cancha a ganar el partido. Todos los jugadores tienen clara esa idea, saben cómo desarrollarla, cada quien en su posición sabe lo que tiene que hacer y eso es un punto a favor”, mencionó el carrilero.
También admitió que las bajas con las que llega Alajuelense a este partido decisivo son de peso, pero “los jugadores que los van a sustituir lo van a hacer de la mejor manera y le pueden aportar mucho al grupo”.
Los inconvenientes surgidos en este viaje, el ver como sus solicitudes se rechazaban por más que muchas personas sí hicieron todo por darle un empujón a la Liga aumentan las ganas en el equipo.
Eso aunado a lo ocurrido en el partido del martes anterior, en el que Atlanta United tomó ventaja en la serie con un penal inexistente y la ineficacia propia al no anotar pese a los catorce remates generados, provocan que Alajuelense quiera hablar en la cancha, por más que el campeón nacional esté diezmado para el reto.
“Yo estoy muy contento de ver el hambre, la ilusión de muchos de estos muchachos jóvenes que estén aquí. Ellos quieren que el partido se juegue, quieren entrar a darle vuelta a ese marcador y a veces cuando las condiciones son adversas, eso saca lo mejor de los ticos y yo espero que este martes no sea la excepción”, expresó el presidente liguista, Fernando Ocampo.
El jerarca manudo sabe que no es fácil, pero está convencido de que quienes están en Atlanta no se guardarán nada.
“La verdad es que el positivismo y las ganas que veo en estos muchachos, ellos saben que es una oportunidad de oro para ellos, que todos quieren aprovechar y espero que nos dé esa tranquilidad para poder sacar el partido”, recalcó.
Bajas en Atlanta United. Brad Guzan vio la cartulina roja en el Morera Soto y este martes no podrá jugar por eso. A él lo sustituyó el joven argentino Rocco Ríos-novo, quien pertenece al Atlanta United 2, pero pasó al primer equipo por unos días. Y fue figura ante Alajuelense.
“Le comento un poco la situación, estamos trabajando con cuatro porteros, de los cuales, tres están aptos y con permiso para jugar el partido, de los cuales uno está expulsado. Entonces tenemos dos a disposición”, expresó el técnico del equipo estadounidense, Gabriel Heinze.
Mencionó que el recién llegado Alan Franco no está disponible para el partido contra Alajuelense, así como Matheus Rossetto, Mo Adams y el arquero Ben Lundgaard, porque están en recuperación.
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