El fútbol femenino costarricense vive en medio de la incertidumbre. El Club Sport Herediano decidió retirarse de la Primera División y no se tiene certeza si un nuevo equipo de Puerto Viejo, Limón, se sumará a la máxima categoría. Este clima de inquietud provocó que los presidentes de cinco equipos firmaran una carta en la que se llama a cuentas a Víctor Hugo Alfaro, presidente de la Unión Femenina de Fútbol (Uniffut).
Los florenses anunciaron el cierre de su equipo el 18 de diciembre. Dos días después, Alajuelense, Sporting, Saprissa, el Municipal Pococí y otro club más (aún no se ha hecho público el nombre) enviaron una carta a Alfaro con peticiones e inquietudes.
Entre ellas, que debe existir un cambio profundo en la participación de los clubes en los procesos de diseño y decisión dentro de la Uniffut, pues “hasta ahora sentimos que se nos ha limitado”, según reza el documento del que La Nación tiene una copia.
Además, los representantes de estos combinados solicitaron una reunión con premura del Comité Director de la Uniffut para que se facilite la información de los estados financieros y los informes de auditorías externas en los últimos tres años.
También pidieron la posición de este órgano sobre lo acontecido con las decisiones tomadas por Herediano (retirarse) y Pérez Zeledón (jugar solo con juveniles), así como sus recomendaciones al respecto.
En la carta solicitaron iniciar un proceso para desarrollar un plan de crecimiento y sostenibilidad financiera del balompié femenino con el fin de que pueda convertirse en profesional en un plazo no mayor a cinco años, pues hasta ahora la liga costarricense es aficionada.
Otro punto importante radica en “rediseñar por completo la estructura de gobernanza y administración de la Uniffut, para que los clubes tengan la injerencia y el voto apropiado, según debe corresponder”.
Por su parte, Víctor Hugo Alfaro anunció que la reunión será pronto.
“Me enteré de la carta de manera informal, me la pasaron desde la Fedefútbol. Nos vamos a reunir en 15 días porque Osael Maroto (presidente de la Federación) quiere estar presente. Yo tengo las respuestas para las preguntas o las dudas que puedan tener los equipos. En la Uniffut todo está en orden y lo conversaremos”
La Uniffut está compuesta por tres asociaciones deportivas que son las que nombran al comité director de esta liga. Los clubes solamente tienen voto para designar a tres (de Adelife) de los seis integrantes de esta dirigencia.
Alfaro es un presidente que suma décadas al mando de esta disciplina. Su presencia en el fútbol femenino lo llevó también al Comité Ejecutivo de la Fedefútbol, donde inició su camino en el 2007.
En la última conformación de la cúpula federativa no fue tomado en cuenta (2023); la representación de la Uniffut recae sobre Jenny González.
Los representantes de los equipos también le solicitan a la Uniffut “apalancarse en la Unafut para aprovechar la experiencia de la liga masculina para conseguir patrocinios y en la organización de las competiciones”.
![Víctor HVíctor Hugo Alfaro tiene 30 años en la dirigencia del fútbol femenino. Desde el 2007 hasta el 2022 estuvo en el Comité Ejecutivo de la Fedefútbol, en sus últimos períodos fue una pieza de confianza de Rodolfo Villalobos. ugo Alfaro](https://www.nacion.com/resizer/v2/UIB6E4Q5DZCIVJNN6P2F3TJAQM.jpeg?smart=true&auth=34077604c03f6f2573da66fee884339bb10f211841c32ca711ac8ceb675a36b2&width=1276&height=802)
Sostenibilidad financiera
La principal tarea que tienen los equipos en la rama femenina es la posibilidad de encontrar un punto de equilibrio a nivel financiero.
La Primera División está compuesta por ocho equipos, dos de ellos ya tiraron la toalla y los otros seis buscan la manera de sostener sus estructuras.
Juan Carlos Rojas, presidente del Deportivo Saprissa, dijo en entrevista con La Nación que la decisión del Herediano de retirarse es un síntoma de un mal mayor; hay una serie de temas en el fútbol femenino que no funcionan como deberían. Añadió que en cuanto a la sostenibilidad de esta disciplina, es muy grave que un club como el florense se marche.
Para el jerarca morado, se debe encontrar la forma de darle sustentabilidad al balompié femenino.
“Si no hacemos un plan estratégico de cómo cumplir los objetivos de esa sostenibilidad financiera, de pronto Herediano no sería el único en marcharse. No es nuestro caso, pero uno escucha rumores de otros que piensan en quitar el equipo y estamos preocupados por la situación”, mencionó Juan Carlos Rojas.
En Alajuelense opinan que la paciencia es la clave para sostener esta competición que va en crecimiento. Las Leonas son el proyecto más sólido que tiene el fútbol costarricense, son las monarcas de Uncaf y en diciembre de 2023 coronaron su hexacampeonato en el torneo local.
“Está en creer en el proyecto y en tener esa visión, no se pueden esperar resultados de forma inmediata. Hoy en día yo puedo decir que el equipo femenino se mantiene casi en su totalidad de los ingresos generados por el propio equipo femenino. A nivel mundial el fútbol femenino es el que más está creciendo y Costa Rica no se puede apartar de ese camino”, dijo León Weinstok, directivo manudo, en conversación con este diario el 21 de diciembre.
Los clubes que integran la liga de Primera División del fútbol femenino son: Alajuelense, Sporting y Saprissa, que han construido proyectos bastante sólidos y buscan crecer.
Pérez Zeledón está en una etapa de análisis. Pococí, cuyos dirigentes habían adelantado a La Nación que, en caso de aprobarse los cambios que busca la Caja Costarricense de Seguro Social, probablemente se retiraría, misma ruta que tomaría Dimas Escazú.
Herediano le cedió la administración de su franquicia a Puerto Viejo de Limón y el recién ascendido es Tsunami Azul de Santa Cruz de Guanacaste.
La Caja lo que busca es garantizarse que los clubes cumplan con las cargas sociales que les corresponde.