Siempre que va al estadio Alejandro Morera Soto se meten con él, le gritan de todo y le toca lidiar con un ambiente hostil. Sin embargo, el delantero parece tener un peculiar “romance” con este escenario cada vez que Saprissa se enfrenta a Alajuelense.
Aunque parezca extraño, el lugar donde Rodríguez celebra más goles en clásicos es precisamente la Catedral del Fútbol. Con el tanto que anotó este domingo en el empate 1-1, llegó a ocho goles en clásicos ante la Liga, de los cuales cinco han sido en el Morera. Según sus recuerdos, solo uno lo ha marcado en la Cueva.
“Creo que he metido muchos goles en todas partes, es mi trabajo... Es curioso que se me dé así, creo que tengo ocho goles en clásicos y solo uno fue en Saprissa. Me siento bien en este estadio, me gusta celebrar acá, es una cancha donde me siento cómodo”, comentó el delantero entre risas tras el partido de la fecha ocho del Apertura 2024.
Luis Quirós, periodista y estadígrafo, destaca que con este gol, Ariel igualó a Odir Jacques y a Wálter Centeno, quienes también lograron ocho anotaciones en clásicos.
Además, el “14″ de los morados registra 116 festejos en toda su carrera, 103 con la camiseta del Monstruo. El ariete está a un gol de igualar a Eduardo Chavarría, quien es dueño de la tercera posición de máximos romperredes de la S. El segundo puesto es para Edgar Marín (108) y el líder indiscutible es Evaristo Coronado (148).
Para Rodríguez, estos números son significativos, y no oculta su satisfacción por marcar en la casa del archirrival. No obstante, reconoce que en el club donde juega, lo que realmente cuenta son los triunfos y los títulos.
“Estoy contento por el gol, pero lo que más importa es el grupo y sacar los tres puntos. Lamentablemente no ganamos, y lo que queda es seguir adelante y tratar de aportar con más goles, que es lo que me corresponde. Siempre es bonito anotar, especialmente en un clásico en el Morera Soto, pero me hubiera puesto más feliz la victoria”.
Ariel no pudo completar los 90 minutos frente a los rojinegros y pidió el cambio en el minuto 63. Sin embargo, para tranquilidad de los saprissistas, no fue por lesión, sino por el desgaste de chocar en solitario contra los defensas del León.
El delantero ha superado las dolencias que lo aquejaban y, poco a poco, va recuperando ritmo. Su deseo es contribuir a sacar al equipo adelante en un momento en el que hay muchos lesionados y sancionados.
“Vamos mejorando poco a poco. Sabemos que las lesiones y las expulsiones hacen que esto sea más complicado, pero los que vienen atrás deben demostrar. Vamos de menos a más”, concluyó.