
Bismar Acosta llevaba ocho años de ser legionario, pero después de que en 2020 no pudo tener a su lado a su familia, supo que era el momento preciso de regresar a casa.
Con esa decisión tomada, el futbolista comenzó a buscar equipo y su representante, Daniel Solís, le dijo que Cartaginés era el club que le presentaba la mejor oferta, así que no lo pensó dos veces.
Su nombre sonaba en otros conjuntos, pero él se inclinó por los brumosos y cuenta que fue un asunto que se resolvió un poco rápido.
“Sé lo que es Cartago, sé las ganas que tiene de ganar algo y es lo que vengo a aportar acá. No quiero irme con las manos vacías, quiero ganar algo, tienen excelentes jugadores. Ya pude conversar con ellos ahora y esto es así. Se ve que el equipo ha tenido altibajos, pero qué equipo no los ha tenido, así es esto, el fútbol es así”, destacó el futbolista que llegó al país el miércoles a las 8 p. m. y este jueves se levantó a las 5 a. m. para ir a su nueva casa.
Asegura que en lo deportivo lo ilusiona muchísimo ser parte de los blanquiazules.
“Fue porque quiero ganar algo y Cartaginés está urgido de eso. Espero nada más que si Dios lo permite y hacemos las cosas bien, nos hagan una estatua ahí afuera después (ríe...), porque Cartaginés está urgido de eso y queremos hacer algo bueno, cambiar el chip totalmente y por eso se inclinó la balanza, porque quiero ganar algo, porque quiero hacer algo diferente”.
Considera que al ser uno de cuatro grandes, los integrantes de Cartaginés deben dar el 110%, porque el 100 ya no alcanza.

“Si verdaderamente queremos hacer algo tenemos que poner un poquito más de nosotros y entonces eso es lo que quiero venir a aportar, experiencia y con la convicción de que todo va a salir bien”.
Cuenta que en Europa maduró y lo hizo tener una perspectiva muy distinta. Quizás, muchos piensan que ser legionario es fácil, pero afirma que hay situaciones que no son sencillas.
“Un lugar sumamente difícil para jugar al fútbol por las condiciones, ya todos sabemos lo frío que es, un jugador que no está acostumbrado a climas tan bajos es difícil, pero me pude mantener ocho años jugando regularmente”.
Pero la pandemia sí lo afectó, en el sentido de que la distancia con su familia no era fácil de llevar y asegura que eso inclinó más la balanza para llegar al Cartaginés.
“Estuve un año sin ver a mi familia, el año pasado y me costó mucho, fue una decisión que para comenzar este año llegué a un acuerdo con el Brann de Noruega de poder rescindir el contrato y de poder estar con mi familia, que es lo más importante”, indicó.
Y agregó: “Tengo dos hijos pequeños y ellos preguntan por mí todo el tiempo. No es fácil solo llamarlos por videollamadas. Se sabe que en el crecimiento de un niño se necesita del padre y la madre juntos, entonces eso fue lo que inclinó más la balanza de poder venirme y agradecido con el Club Sport Cartaginés por darme la oportunidad de regresar otra vez a mi país y ser mi nueva casa”.
Acosta es un jugador polifuncional. Desde que estaba en Belén se desempeña en la zona defensiva, pero también es contención.
“Siento que son dos posiciones que puedo manejar bien”.
Cree que no le costará ponerse a tono cuanto antes. Detalló que el campeonato noruego empieza en abril, de modo que la pretemporada arrancó el 4 de enero. Viene con un trabajo intenso de preparación de dos semanas y media.
“No he hablado mucho con Hernán (Medford), solo un toquecito en la mañana, que poco a poco me va a ir evaluando para ver si puedo estar lo más rápido posible con el grupo, pero en sí, siempre lo he admirado, es un excelente entrenador, ya todo el mundo sabe las cualidades de Hernán. Entonces no hay nada más que decir, simplemente trabajar”, destacó el defensa de 34 años.
En el fútbol nacional, Acosta defendió los colores de Santacruceña, San Carlos, Herediano y Belén. Luego se marchó a Noruega para jugar primero con IK Start y posteriormente con el Brann.
Ahora retornó al país y tiene contrato por año y medio con el equipo de la Vieja Metrópoli.
Los brumosos son sétimos en la tabla, con ocho puntos en siete partidos y el sábado, a las 5 p. m., visitarán a Sporting FC.
Según Acosta, es prematuro pensar en si él estará en convocatoria para este encuentro, pues admite que viene con el efecto del jet lag, debido a que su organismo está adaptado al huso horario europeo.