Jeaustin Campos, técnico de Herediano, no puede participar en cualquier actividad relacionada con el fútbol al menos durante seis meses, luego de que el Comité de Ética de la Federación Costarricense de Fútbol (FCRF) lo encontrara responsable de proferir insultos racistas contra el jugador saprissista Javon East.
La sanción hace referencia a hechos que ocurrieron cuando Campos era entrenador del Deportivo Saprissa y compartía camerino con el jamaiquino East, quien lo denunció en marzo anterior.
“Se declara al señor Jeaustin Campos Madriz responsable de los hechos imputados en el presente procedimiento y, con ello, haber infringido el artículo 23 y el artículo 24 del Código de Ética de la Federación Costarricense de Fútbol. Por lo tanto, se le sanciona con la prohibición de participar en cualquier actividad relacionada con el fútbol por un periodo de seis meses y una multa económica equivalente a la suma de $5.000 (¢2,6 millones)”, informó el Comité de Ética en un comunicado divulgado por el departamento de prensa de la Federación.
En dicho boletín se aclara que la resolución aún no está en firme, ya que puede ser impugnada según la normativa oficial de la FCRF y la FIFA.
Pero ¿qué pasa ahora? Es la pregunta que probablemente muchos se hacen. ¿Puede o no Jeaustin Campos dirigir el sábado en el inicio de las semifinales contra Alajuelense?
Para contestar esa interrogante, debemos ver qué dice el Código de Ética de la Federación Costarricense de Fútbol.
En el artículo 44, “Efecto de las decisiones”, dice textualmente: “Las decisiones de la Comisión de Ética podrán ser apeladas dentro de los ocho días hábiles después de notificadas ante el Tribunal de Alzada de la Fedefutbol. No obstante, la interposición del recurso de apelación no suspenderá los efectos de la decisión, pero la parte podrá solicitar la suspensión de la decisión al Tribunal de Alzada dentro de los tres días después de notificada la decisión por la Comisión de Ética. La decisión del Tribunal de Alzada no tendrá ulterior recurso”.
Esto significa que Jeaustin Campos está en su derecho de apelar y tiene ocho días hábiles para hacerlo. Mientras el Tribunal de Alzada resuelve si le acepta o no la apelación, no puede participar en ninguna actividad relacionada al fútbol, como dice el castigo.
La defensa del timonel de Herediano debe moverse rápido para que el Tribunal de Alzada le apruebe la solicitud de la suspensión del castigo antes del sábado, primer juego de la semifinal contra Alajuelense. Si Alzada le aprueba la apelación y suspensión a la sanción antes del sábado, Campos puede dirigir sin problema alguno.
Adolfo Hernández, abogado de Campos, reaccionó con asombro en su cuenta de Facebook ante el castigo impuesto a su cliente. Para él, se presentaron una serie de inconsistencias mostradas por el Tribunal, que se basa en hechos y testimonios falsos.
Hernández agregó que van a acudir con todo el peso, la fuerza legal y los recursos jurídicos que estén a su alcance para combatir la resolución deportiva dictada. Esto, sobre todo después de haber discutido con integrantes del Comité de Ética que, según él, se tomaron fotos con los testigos y mostraron abiertamente sus colores.
“La resolución final, firmada por miembros del Comité de Ética que no estuvieron presentes en las audiencias de evacuación de prueba de los testigos, permitió la presencia de terceros manipulando la prueba y violentó el procedimiento de forma flagrante. Estas situaciones se verán y conocerán en los respectivos tribunales deportivos”, destacó Adolfo Hernández.
Los hechos que tienen a Jeaustin Campos envuelto en esta situación ocurrieron a finales del mes de marzo cuando era técnico de Saprissa. Javon East, delantero de los morados, lo denunció por insultos racistas, hecho que se hizo público el 27 de marzo y que provocó el despido del técnico sin responsabilidad patronal.
Dos días después de ser despedido por Saprissa, Jeaustin habló a los medios de comunicación en una conferencia de prensa.
“Nunca me di cuenta de ninguna denuncia, nunca la vi, nunca me la enseñaron. Me di cuenta el lunes de que la hicieron pública y se ventiló”, dijo Campos en ese instante y añadió: “No se me ha juzgado; se me ha culpabilizado y tachado”.