Óscar Cuico Bejarano, ya desaparecido, es la referencia más antigua en Costa Rica de un futbolista que se hace empresario.
Aquel rápido y explosivo extremo izquierdo de Herediano fundó una tienda de artículos deportivos que lleva su nombre en la década de 1960.
Según recordó el exjugador y preparador físico Manrique Quesada, el negocio está ubicado a 100 metros de la catedral de Heredia, todavía está en funcionamiento, aunque con otros dueños.
En la siguiente década aparecieron mayor frecuencia. El primero fue el volante saprissista Luis Chacón, quien tuvo la tienda que lleva su nombre.
Pocos años después, en 1972, tres morados, el defensa Heriberto Quirós y los delanteros Odir Jacques (brasileño) y Édgar Marín, se unieron para formar otra tienda: Mundo Deportivo y que luego tuvo una sucursal llamada Mundi Sport.
“Yo jugué en Estados Unidos y vi que allá, los grandes futbolistas tenían sus tiendas y traje la idea a Costa Rica. Nos fue muy bien en este negocio”, recordó Marín.
Odir indicó que esa sociedad se mantuvo 15 años y luego siguió él solo en otro negocio llamado Deportes Odir durante 14 años.
“Es duro tener algo propio, además de futbol, pero es una garantía para el futuro”, afirmó el ahora entrenador que viajó la semana pasada a un curso de refrescamiento para técnicos en su natal Brasil.
“Cuando tenía mi negocio, el asunto se complicó . Mi esposa y mi hijo me ayudaban, pero no había tiempo para vacaciones, pues no podíamos dejar la tienda sola.
“Sin embargo, valió todo el esfuerzo”, sostuvo.