EscucharFestejó en grande, gritó el gol con todas sus fuerzas y provocó la molestia entre algunos jugadores de la Liga. Marcel Hernández hizo las del matador, cortó rabo y orejas. En la única que tuvo sacudió las redes, se quitó la camisa como simulando al torero con su capote al concluir la faena y a los aficionados en las gradas les mostró dos dedos, clara señal de que faltan dos encuentros.
Claramente se podía ver donde Marcel decía: ‘dos más, dos más’ al tiempo que mostraba dos dedos. Claro se refería a que esto se extendió, que la fiesta que podían tener los manudos para festejar el título número 31 quedaba suspendida. Cartaginés alargó a una gran final.
Antes de decir ‘dos más, dos más’, algunos futbolistas de la Liga se molestaron con el cubano porque festejaba sin su camisa y encarando a la afición alajuelense,. Johan Venegas llegó a reclamarle, le señalaba a los seguidores manudos, como afirmando que se burlaba de ellos. Marcel decía que no, siguió tranquilo, mientras sus compañeros lo felicitaban.
“Le debo dar gracias a Dios, a mis compañeros, mi familia y mi novia. Esto es de todos, ganamos un punto muy importante cuando nadie daba un centavo por nosotros y faltan dos encuentros más”, dijo Marcel Hernández al concluir el compromiso.
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El delantero no dudó en señalar que el tanto contra la Liga es el más importante que ha marcado en el campeonato nacional.
“Sí el más importante porque nos da la satisfacción de seguir luchando y creyendo cuando nadie lo hizo”.
Marcel aprovechó para desahogarse y prácticamente reclamarle a quienes le cuestionaron que no venía anotando, que no pesaba en el ataque y que había sido muy bien marcado por los manudos Giancarlo el “Pipo” González y Alexis Gamboa.
“Escuché todos los comentarios, toditos los comentarios de los periodistas, pero no es fácil jugar contra un gran equipo como la Liga y ahora se vienen dos juegos más”.
Según el artillero se dijeron muchas cosas sobre su labor, pero no se analizó lo que él hacía en el rectángulo de juego.
“Hay muchas cosas que van de la mano, a veces debo hacer otras cosas que quizá no se notan, pero no quiere decir que juegue mal. En estas instancias es así, son partidos muy cerrados y gracias a Dios y seguimos en la lucha”.
Respecto a su celebración, Marcel aclaró que no se burló de la afición o de los futbolistas rojinegros.
“Eso lo hace cualquiera, es un gol que nos da aire y cualquiera se quita la camisa. Eso lo han hecho millones de jugadores, millones lo han hecho. No sé cómo lo ven aquí, pero en un gol así, cualquiera se quita la camisa”.
Hernández le agradeció a sus compañeros por el trabajo y destacó: “Mis compañeros son unas bestias”.
