Joaquín Bernardo Guillén fue el candado de Alajuelense en los 90. Rudo, férreo, de marca agresiva, pero limpia. Hoy, este manudo de corazón vive en Estados Unidos, pero no le pierde el rastro al plantel y, en la semana del clásico nacional, analizó el juego para La Nación.
Saprissa y Alajuelense se verán las caras el próximo sábado a las 8 p. m., en el Ricardo Saprissa.
Guillén fue claro en que Alajuelense se ve mucho mejor que el Saprissa; de hecho, él se ilusiona con alzar el trofeo nacional y aclara que nota un aire de campeón en las tiendas erizas, por lo que el clásico puede servir para reafirmar esa sensación.
—¿Cómo analiza el momento de Alajuelense?
—Lo veo bien. Siento que la Liga está tranquila, veo al equipo compacto, lo siento metido y concentrado. Veo al plantel jugando bien; tienen buen entrenador y, sobre todo, lo veo ordenado.
—¿Cuál es la gran virtud del Alajuelense de Guimaraes?
—Pienso que el orden. Ellos tienen una aplicación y un patrón a seguir. Alexandre es muy estudioso y saca un gran provecho del conocimiento que tiene; la prueba es que nos tiene líderes. Siento que el sistema que usa ha hecho creer de nuevo al aficionado y nos tiene ilusionados.
—¿Cuál es el punto débil de la Liga?
—La verdad, no le veo. Ahora veo un equipo muy positivo, compacto, y sobre todo, los veo muy juntos, y eso es trascendental.
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—¿En un clásico no se puede perder?
—Pienso que son partidos diferentes; son partidos que reviven la historia. Yo jugué muchos clásicos y uno siempre desea ganar. Es que, vea, cuando uno pierde un clásico, el ambiente golpea; es como iniciar de nuevo, hay que volver a agarrar confianza. Ahora, yo no creo que a la Liga esto le pase, porque está mejor que Saprissa, además de que este Saprissa no es el mismo que lleva cuatro torneos ganados.
—¿Si la Liga gana la fase regular, es campeón?
—Siempre que empieza el campeonato me ilusiono, pero este año sí se da, porque el grupo está unido y compacto. Ahora que estuve en Costa Rica, fui a visitar el CAR, estuve con los utileros, con Mingo, conocí a Bryan Ruiz... Saludé a Alexandre Guimaraes y la verdad es que hay un aire diferente, se siente un aire de campeón; eso se ve, se nota.
—¿Una victoria manuda qué mensaje manda?
—Una victoria en un clásico es mucha motivación; es creer en el grupo que hay. La unión se fortalece y el aficionado agarra confianza, motivación; eso es clave.
—¿Una victoria morada qué mensaje manda?
—Es que en estos partidos puede darse cualquier resultado, pero yo no veo a Saprissa ganando. La Liga está madura, está fuerte, y si pierde... No hay afectación. Si no salen las cosas bien, ellos se levantarán.
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—¿Es peor llegar favorito a un clásico?
—Esos partidos son aparte. Yo siempre vi los clásicos como una final; siempre traté de dar todo y los jugadores que están ahí lo saben. Llegar favorito no es un problema, pero sí pone la obligación mucho más alta.
—¿Es Saprissa más peligroso cuando viene irregular?
—No, no. Saprissa ahorita está como en un periodo de transformación con su nuevo técnico. Venían con un proceso y lo cambiaron; ellos están en un plazo de adaptación. Ahora juega la parte anímica, el coraje. Yo solo espero que en la Liga den todo por esa hermosa camiseta que yo llevo siempre con orgullo, la de mi Liga Deportiva Alajuelense.