Nueva York (AFP). - Una empresa panameña importadora de uniformes de fútbol se declaró culpable este miércoles en Nueva York de sobornar al expresidente de la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefútbol), en otro caso en el megaescándalo de corrupción en la FIFA.
Mimo International Imports and Exports admitió fraude por haber pagado ilícitamente 500.000 dólares (unos ¢284 millones) a Eduardo Li, el exjefe de la federación tica que fue arrestado en 2015, dijo la fiscalía federal de Brooklyn en un comunicado.
Li se declaró culpable de extorsión y fraude en octubre de 2016, lo que llevó a su suspensión de por vida de la FIFA.
Como parte de su declaración de culpabilidad, Mimo International aceptó reembolsar 500.000 dólares a la federación costarricense, pagar una multa de 900.000 dólares (cerca de ¢512,6 millones) y liquidarse voluntariamente en un plazo de tres meses, dijo la fiscalía luego de una audiencia en una corte federal de los Estados Unidos.
El agente del FBI que manejó el caso, Bill Sweeney, dijo que su agencia no escatimará esfuerzos para detener el comportamiento criminal que mancha el deporte del fútbol.
De acuerdo con la declaración del fiscal, Mimo International y Li firmaron un contrato en 2012 bajo el cual la empresa panameña patrocinaría a la federación costarricense y proporcionaría los uniformes (Lotto) y otros implementos deportivos durante seis años.
A partir de ese momento, las selecciones nacionales se vistieron con esa marca, con un contrato que se extendía hasta el 2018, según ha publicado la fiscalía estadounidense.
Una vez pasado el Mundial en 2014, sin embargo, la empresa New Balance se interesó en vestir a la Sele. Para conseguirlo, necesitaba que Costa Rica rompiera el contrato que lo ligaba —a través de la empresa Mimo Internacional— a la indumentaria Lotto. Según explica la fiscalía estadounidense, Eduardo Li y el representante de Mimo encargado de Lotto confabularon para lograr que New Balance pagara una indemnización, cuyo monto no ha sido revelado. A cambio, Eduardo Li recibiría 500.000 dólares a escondidas de New Balance.
La Nación intentó conversar con el actual presidente de la Fedefútbol, Rodolfo Villalobos, quien en ese momento era el tesorero de ese Comité Ejecutivo presidido por Li para efectuarle una serie de consultas, entre ellas, cuál era el monto de esa indemnización.
El jerarca estaba dispuesto a conceder la entrevista, pero en pocos minutos se asesoró con su equipo de comunicación y otros integrantes del Ejecutivo y mencionó que al tratarse de un tema tan delicado, este jueves por la tarde evacuará las consultas en una conferencia de prensa.
El escándalo de la FIFA se abrió en mayo de 2015 con los arrestos en Suiza de ocho altos ejecutivos del fútbol de la Conmebol y la Concacaf durante un congreso en Zúrich.
Rápidamente se extendió por América Latina, y surgieron más detalles con el juicio en Nueva York de tres exfuncionarios sudamericanos a fines de 2017.
Dos de los ejecutivos, el exjefe de la Federación Brasileña José María Marín y el expresidente de la Conmebol Juan Ángel Napout, fueron condenados.
La sentencia tendrá lugar en abril.
El tercero, el expresidente de la Federación Peruana Manuel Burga, fue absuelto.
En total, 42 exdirectivos del fútbol han sido acusados en el sistema de justicia de los Estados Unidos.
La mayoría de ellos son sudamericanos, pero también hubo algunos estadounidenses, como Chuck Blazer, un exadministrador convertido en informante del FBI que murió de cáncer en julio del año pasado.