El próximo 28 de diciembre, Esteban Alvarado Brown cumplirá un año desde que fue presentado como el refuerzo de lujo de Limón FC, para el Torneo de Clausura 2021, luego de su repentina salida del Herediano
Desde aquella fecha, el espigado arquero vivió un tobogán de emociones, donde pasó de sufrir el descenso con el cuadro caribeño a ser llamado por el técnico Luis Fernando Suárez a la Selección Nacional para la Copa de Oro, donde se lesionó, por seis meses, hasta finalmente levantar su segundo trofeo de campeón con el Herediano.
Esteban fue estelar en los últimos tres compromisos del cuadro florense, en el actual Apertura, una vez que superó una lesión en su rodilla derecha, para ser figura ante los morados. Incluso Herediano ganó los tres partidos que disputó con él ante el Saprissa.
Su titularidad no estuvo alejada de la controversia, debido a que el preparador de porteros, Miguel Segura, renunció ante la decisión del técnico Jeaustin Campos de dejar en el banquillo al arquero Bryan Segura, aunque poco después todo se resolvió ante la intercesión del gerente de Fuerza Herediana, Jafet Soto.
Al concluir el compromiso y en medio de las celebraciones, Alvarado dio a conocer un pensamiento que rondó por su mente durante algunos días, antes de sentir que todavía podía darle mucho al fútbol nacional.
“Sinceramente yo me pensaba retirar del fútbol ahora, había pasado por algunas situaciones que me llevaron a tomar esa decisión. Sin embargo, después de la lesión en la Selección Nacional recapacité: deseo seguir jugando y, en estos últimos años que me quedan como profesional, estar en el nivel más alto posible”, indicó Alvarado.
“A veces los jugadores pasamos por baches mentales y uno es relegado a un tercer plano. Son situaciones que pasan, de las cuales ahora no vale la pena hablar. Hoy demostramos de qué estamos hechos. Yo hablo en la cancha y ustedes son testigos de eso. No tengo palabras, es uno de los títulos que más me saben”.
Un Herediano más
El mundialista en la Copa del Mundo Sub-20 de Egipto 2009, confesó que el Herediano es un equipo muy exigente, donde cada jugador sabe que hay una gran responsabilidad con el club.
“Con el Herediano, he sido campeón contra los dos grandes; ante Alajuelense (2019) y ante Saprissa. Creo que el Herediano no desentona y demuestra que es un grande definitivamente y aunque nos quieran minimizar a veces, creo que Costa Rica ya se dio cuenta que Herediano es Herediano”, explicó Alvarado.
“En cada partido que disputamos hay que estar muy concentrado. Don Aquil (Alí) una vez me dijo: ‘Aquí los adoptamos, pero aquí es rindiendo, porque tenemos una afición muy exigente que acuerpa, apoya, pero hay que darle resultados’”.
El título y el buen momento que atraviesa el siquirreño de 32 años lo motivan para pensar en un nuevo llamado a la Tricolor y disputar la recta final de las eliminatorias rumbo al Mundial de Catar 2022.
“Si a uno lo llaman a la Selección debe estar allí. Sufro más viéndolos por la televisión que cuando me convocan, por lo que ojalá el profe (Luis Fernando Suárez) me tome en cuenta y eso no depende de mí. Me siento muy bien, tengo que seguir trabajando para retomar un nivel más alto que el actual”, aseveró Alvarado.
“Gracias a Dios tengo un don y quiero terminar mi carrera de la mejor manera y sacarle provecho, porque me siento orgulloso de lo que he logrado. Estos años me han ido calmando el temperamento. Soy una persona más tranquila y que no haya duda y que nadie tenga duda de que soy un Herediano más”.