Con la mesura que le caracteriza, sin negarse a la autocrítica, Evaristo Coronado, gerente deportivo del Saprissa, le puso el pecho a las críticas luego de la derrota 2-5 ante Alajuelense con el estadio a reventar.
Coronado atendió a La Nación para responderle al saprissismo qué le pasó al equipo en el clásico nacional, si a Wálter Centeno se le trata diferente por ser gloria de la institución y si el equipo necesita portero.
—¿Qué análisis hace en frío de lo sucedido?
Uno siente que no era para tanto, pero es el fútbol. Alajuelense está haciendo buen trabajo en este campeonato, no vamos a ser mezquinos a la hora de reconocer que tuvimos un gran rival al frente. Nosotros hicimos nuestro trabajo. Después de que cae el tercer gol fue un golpe emocional, ahí con ese costó más. Luego el cuarto y llegó el estrés a jugar.
—¿Golpeó más el segundo que el tercero?, porque recién habían empatado (2-2).
Es la sumatoria de todo, son golpes de todo. Es un estrés adicional el que se maneja. Estoy con la necesidad que debo empatar. Es bien difícil manejar. Todos los goles hicieron daño.
—¿Qué pasa con los porteros de Saprissa que no se consolidan?
Yo fui futbolista, todos los que estamos dentro del fútbol estamos siendo valorados día a día, uno no puede juzgar a una persona por un evento puntual. Ninguno de los tres ha logrado hacerse con esa titularidad como lo hicieron otros porteros años atrás.
“Cuando un portero agarra cierta regularidad es producto de un trabajo de cosas buenas, para que el entrenador le dé esa continuidad. Una vez que lo logra se convierte en ídolo y si ocasionalmente comete un error se le tolera. Ninguno de los tres ha logrado hacerse de esa regularidad. Cuando cometen errores son señalados inmediatamente. Eso no significa que son malos guardametas”.
“Como ese puesto de portero, todos los demás compañeros de campo están siendo valorados día a día. Al final se toman decisiones”.
—¿Buscará un portero en el próximo mercado de fichajes? ¿Necesita otro arquero el Saprissa?
Eso me lo han preguntado muchas personas. Nosotros tenemos que hacer una valoración de muchas cosas. En dónde podríamos invertir recursos. Tenemos una vacante de extranjero, podría ser invertido ahí o en otro puesto. Puede que el entrenador prefiere reforzar una zona u otros sectores del campo.
—¿Por qué el equipo no tiene equilibrio: puede golear pero también puede caer estrepitosamente?
Nosotros respetamos a todos los técnicos que han llegado al club. Si en algún tipo de conversación amerita tocar algún tema específico, se toca. Se le deja libertad a cada uno de los técnicos. Yo he observado cambios en Wálter. En Panamá, por decirle algo, el equipo jugó más directo en una cancha difícil y ante un equipo potente físicamente. Él hizo modificaciones.
“Este domingo estábamos en nuestra casa... pienso que él trabajó en busca de los puntos, era la única manera de ir buscando presión a la Liga, al final las cosas no salieron como él las visualizó. No hay un técnico que plantee algo con el objetivo de que lo goleen. Estoy en mi casa es todo o nada y desdichadamente cayó el cuarto gol en vez del empate y fue otro partido”.
—¿Han conversado con Wálter Centeno tras la caída?
Yo sí he platicado en dos ocasiones con Wálter, paso en constante comunicación con él y los jugadores. Estamos dolidos, pero estamos claros que es una batalla. El jueves tenemos otra batalla y la guerra termina cuando finaliza la fase final y la final. Nosotros estamos trabajando para estar en la fase final y pelearla y ganarla y volvernos a ver las caras.
—¿Se mide diferente a Paté Centeno por ser ídolo del saprissismo?
Yo creo que es un jugador que dejó huella en la institución. Eso ayuda bastante no solo a él sino a la institución, pero uno necesita el apoyo. En ese partido nadie tenía la más mínima idea de que iba a ocurrir lo que ocurrió. Tampoco fue que nos pasaron por encima; el tercer gol cambió todo. Antes de eso era un partido muy equilibrado. Ese es el fútbol y el deporte. Tenemos que ser claros de que ha sido un golpe muy duro.
—¿Apelará Saprissa la sanción a David Ramírez?
Vengo saliendo de Junta Directiva, no estoy al tanto, preferiría no opinar al respecto para no cometer errores.
—¿Cómo estuvo la Junta Directiva? ¿Se habló mucho del clásico?
Dichosamente es una directiva de muy alto nivel, lo que menos se habla es de fútbol, se habla del Saprissa como empresa o institución que tiene equis valores. A nivel de directiva no, es básicamente la parte operativa de la institución y dichosamente es así. No se toman decisiones al calor del resultado, eso se maneja por aparte.
—¿Tiene con que ser campeón el Saprissa luego del golpe?
Si pensaba que sí hace una semana, no voy a dejar de pensar lo mismo. Fueron los mismos equipos que jugaron un par de meses antes en Alajuela. No sé si me doy a entender.
—¿Por qué el equipo se tiende a caer en esta etapa? En el torneo anterior pasaron seis partidos sin ganar.
Estamos en continuo análisis, dentro de lo que hacemos está la carga física de jugar dos torneos a la vez; dos torneos que a nosotros nos interesa estar siempre peleando. Saprissa no llega a un torneo a participar; siempre llega a pelar.
“Lo he sostenido muchas veces, no se puede garantizar títulos, pero siempre vamos a estar peleando. Es una carga que tal vez la gente que no está involucrada dentro de un equipo profesional no lo ve tanto. Nosotros lo vemos. Es mucho el impacto de pensar en dos torneos, el estar desgastando en dos torneos, al final pesa”.