Saprissa se llenaba de más fe en la casa del Philadelphia Union con ese gol tempranero convertido desde el manchón blanco por Luis Paradela en Estados Unidos, pero luego le tocó morir con las botas puestas en la primera ronda de la Copa de Campeones de Concacaf.
Aquel gol tempranero fue poner esta serie con un global de 3-3 apenas en el minuto 13. Sin embargo, tres minutos después, Julián Carranza empató en complicidad con un error defensivo de Pablo Arboine, pero también con un grave fallo de los árbitros, muy a pesar de que en esta competición se usa el videoarbitraje (VAR).
Ahí iniciaron los problemas de un partido en el que sin duda alguna, el VAR se robó el show, al menos en el primer tiempo.
Según el exárbitro Rándall Poveda, esa primera anotación del Philadelphia Union debió invalidarse por fuera de juego.
“Yo tengo un sistema de televisión en el que puedo devolverme y parar las tomas y sí mantengo que hubo fuera de juego en ese gol”, expresó Rándall Poveda. Además, consideró que también las veces en las que se echó mano del VAR se perdió demasiado tiempo para tomar la decisión, cuando se tienen muchos ángulos de las jugadas y, por lo tanto, debería ser más rápido.
El mismo criterio exteriorizó Henry Bejarano, al afirmar que en el primer gol del Philadelphia Union hubo posición prohibida.
“Me extraña de la gente del VAR, verdaderamente, porque para mí interfiere sobre un adversario, está más adelantado un poco y para mí es fuera de juego”, señaló Henry Bejarano.
Mientras que en el segundo gol de la ‘S’ descartó que existiera fuera de juego. Considera que ahí sí se implementó bien la revisión en el VAR.
En cuanto al tiempo perdido, Bejarano destacó que así son esas situaciones, porque en las acciones de gol, o fueras de juego, el árbitro no puede reanudar antes de que los encargados del VAR le digan que puede hacerlo.
Orlando Portocarrero analizó con más detalle el trabajo del árbitro central hondureño Selvin Brown y fue enfático en que durante los primeros 45 minutos, su trabajo fue bastante desteñido.
“En el primer gol del equipo casa hay una clara posición fuera de juego, que me parece que el asistente 2 señala y él más bien decreta gol. Es un error de grueso calibre que genera un impacto al final del partido”, detalló Orlando Portocarrero.
Añadió que en el tanto de Warren Madrigal, que sembró algunas dudas, él está convencido de que sí era válido.
“Viéndolo detalladamente, viene de un tiro de esquina y hay un jugador con tacos verdes que lo habilita. Ese gol está bien dado. En términos generales puedo decir que Selvin Brown quedó debiendo al fútbol”.
Portocarrero dijo que el catracho tiene buena estampa física y desplazamientos buenos para estar cerca de las acciones, pero que corra no es sinónimo de buenas decisiones y cometió el pecado de quitarle fluidez al partido.
“En los primeros minutos estuvo bastante intenso, pero pitó sencillas faltas y eso le resta dinámica y me extraña que el árbitro actúe de esa forma, porque Concacaf busca dinámica, fluidez a los partidos y si tiene que amonestar o expulsar se hace y hay jugadas donde se podía continuar y él no tuvo una buena lectura”.
Orlando Portocarrero dijo que lo más curioso es que hay VAR y se presentan estas cosas y no entiende qué es lo que pasa.
“Se consulta en el gol de Saprissa no sé por qué, es buscar pelos en la sopa donde no los hay. En el penal se tardó demasiado y vea la cantidad de minutos de reposición. El VAR bien implementado es bueno, pero según los expertos, entre más uso del VAR, más deficiente es el trabajo de los árbitros, porque los de Concacaf se están volviendo dependientes de eso”, reflexionó.
Mientras que Greivin Porras apuntó que el VAR es una herramienta tecnológica que casualmente se hizo para cuando hay acciones muy ajustadas en las que pasan las repeticiones, o la asistencia del réferi por medio del video y se toman las decisiones de acuerdo a las reglas de juego.
“El árbitro Selvin Brown se ha apoyado correctamente, a pesar de que a veces no nos pasan a los televidentes algunas imágenes que ellos sí observan y conversan internamente y toman la decisión”, destacó Greivin Porras.
Después del primer tiempo en el que el árbitro dejó muchas dudas, Selvin Brown mejoró sustancialmente. Según Orlando Portocarrero, le dio mayor fluidez al partido, tuvo una mejor lectura de juego, muy buenos desplazamientos, y por ende, toma de decisiones correctas, como la roja que les mostró a los de casa por una acción contra Javon East, algo que consideró como juego brusco grave.
Fue un partido de errores de los dos equipos y de los árbitros, con un 2-3 con el que Saprissa forzó a tiempos extras, con ese global de 5-5. Y en el cierre, pese a que el tricampeón nacional tenía un hombre más, cayó con las botas puestas. Hubo un gol más de Philadelphia Union. La historia se acabó con el 3-3 en el juego y un 6-5 en el global.
El equipo estadounidense avanzó y Saprissa se despidió de la Copa de Campeones de Concacaf en primera ronda.