Gustavo Roverano, técnico de Cartaginés, tiene apenas dos meses al frente del equipo, pero en este corto periodo ya reconoció cuáles son los principales problemas de la institución: divisiones con personas allegadas al club, ansiedad en momentos críticos y debilidad mental.
Roverano, uruguayo nacionalizado peruano, afirma que todo estos factores pesan en un plantel que lucha por no descender. El timonel reconoce que pese a informarse muy bien de lo que era la institución, algunos aspectos lo han sorprendido, entre ellos que "hay mucha gente negativa que rodea el club".
Sin embargo, el estratega apunta a salvar a los brumosos de forma definitiva ante Herediano y por méritos propios. Además, recalca que le gustaría quedarse e iniciar el proyecto desde cero.
Señaló que había investigado bien lo que era Cartaginés, ¿es lo que esperaba?
Muchas cosas de las que me dijeron las he corroborado, otras no tanto y en otras se quedaron cortos. Lo que veo es que hay mucha gente negativa que rodea a Cartaginés, son personas que no le hacen nada bien al club y colaboran para que todo esté así, son supuestos hinchas que apoyan y no es tan así, es mi modesto punto de vista. También, hay mucha gente sufrida que están deseando que la situación no esté así, porque he tenido contacto con muchos aficionados y socios que la sufren.
”Parece que mucha gente disfruta cuando Cartaginés va mal. Es algo que no debería suceder, pero uno está acostumbrado y en todos los lugares siempre hay personas que están a favor y otros que están esperando que algo salga mal. Nosotros como parte del equipo debemos hacer una caparazón importante y que lo de afuera no nos afecte, que es la parte más dura, unir a un grupo, apuntar a un objetivo y que no sienta lo externo.
”No es que uno quiera excusarse en el poco tiempo, pero todos sabemos bien que una historia tan grande como la de Cartaginés y de tantos fracasos que ha tenido a lo largo del tiempo, no es tan fácil cambiarla de un momento a otro”.
Los mismos entrenadores ticos dicen que este club es especial y diferente, ¿considera que es así?
Noto que hay momentos comunes y corrientes en los que el equipo demuestra una ansiedad excesiva. Acá noto un estadio ansioso más grande.
”Después, hay situaciones que escucho, asimilo y las analizo, porque me han dicho que jugadores que rindieron en otros clubes vinieron acá y no pasó así, si lo mencionan es por algo. De mi parte, acá no siento presión, he estado en lugares en que hay mucha presión, porque la gente no es tan tranquila, sino que las barras están en los estadios, en los entrenamientos y en todos lados.
”Digo que trabajo tranquilo porque le doy poca importancia a lo que pueden opinar los de afuera. Trabajo para que al club le vaya bien, no por conformar a los de afuera”.
De mantener la categoría, algunos dirán que dejó al equipo penúltimo y otros que lo salvó, ¿qué sabor de boca le quedará con esto?
Esos comentarios son de acuerdo a la intención que cada uno tenga. Marcelo Bielsa daba un ejemplo y decía que el periodismo maneja como quiere los comentarios. El que no tiene buena intención dirá que fue un desastre y que fuimos penúltimos y el que tiene buena voluntad, dirá lo contrario.
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”De igual forma no me asusta que digan que terminamos penúltimos, porque es una realidad. Eso sí, hay que ver todo lo que pasó, cómo fueron las cosas, cómo viene esto de antes y los puntos que se hicieron anteriormente, pero no le doy mucha importancia a esto. Me queda la tranquilidad de que he hecho todo lo humanamente posible, porque agarré una situación muy dura y compleja.
¿Qué es lo que más ha tenido que trabajar en Cartaginés?
La parte mental es la fundamental y primordial en este equipo, tratar de que los jugadores siempre estén positivos, que vean el futuro con optimismo y tratar de corregir los errores que se dan en los partidos. He tratado de trabajar mucho en esto y también lo táctico, que tiene que ver mucho con lo mental, porque la cabeza debe estar en buena forma para ejecutar lo que se le pide.
Sin embargo, ¿en Cartaginés se debe enfocar más en lo mental?
Se puede decir que sí. He tenido situaciones complicadas, pero acá se han dado todas juntas. Debo hacer un análisis tranquilo, con criterio y mesurado. Reconozco que no se han conseguido los resultados que todos querían, pero si analizamos juego a juego, hemos merecido más de lo que recibimos. Nos empataron o perdimos juegos sobre la hora que no debieron terminar así, pero creo que el jugador con el subconsciente llama estas situaciones.
¿A qué se refiera cuando dice que se les han venido todas juntas?
Al tema de los árbitros en contra, desconcentraciones de nosotros mismos y esa cuota de fortuna que no hemos tenido. También el tema mental, expulsiones que son realmente tontas y situaciones que como profesionales debemos manejar, como las sanciones que se dieron fuera del campo por reclamos. Todos estos detalles que se han dado en contra y en otros momentos suceden a favor.
”La única manera de salir de esto es trabajar y ser perseverante, pero cuando sucede algo así no todos los jugadores y seres humanos tienen esa voluntad, ganas y deseos”.
¿Considera que el jugador de Cartaginés ya tiene en la mente que algo va a pasar en los juegos?
A veces pasa eso, porque son tantas situaciones que se han dado y varias veces seguidas, que en ocasiones como que ya uno está esperando que ocurra algo. A partir de la derrota contra Saprissa (gol en tiempo de reposición) uno también empieza a sentir ese temor de que en los últimos minutos no le anoten y es cuando más pasa. No es conscientemente, es el subconsciente porque ya ha sucedido algunas veces”.
¿Cómo es Gustavo Roverano en el manejo del camerino, de mano fuerte o más compañero?
Hay que tener de todo en los momentos adecuados. Los jugadores pueden decir que soy de hacer bromas en ciertos instantes y luego pasamos a lo serio. Tengo momentos y momentos, pero el jugador que se deja ayudar, de mi parte recibirá ayuda, el que no, lamentablemente estará más afuera de mi equipo que adentro.
”Tampoco vengo a decir que soy el más drástico de todos, soy tranquilo y mesurado en todas mis decisiones, pero cuando tomo una medida soy firme y no hay vuelta atrás. No me va a cambiar una decisión ninguna situación que tenga un jugador”.
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¿Al llegar a Costa Rica pensaba que podía salvar rápido al equipo y pelear clasificación?
Veía que se estaba muy distante de los de arriba, no era imposible, pero tampoco voy a pretender pasar de los últimos lugares a salir campeón.
”Todos tenemos las mayores aspiraciones y yo también, pero también hay que ser realista. Cuando se está a una distancia tan grande y se viene de tantos problemas en los últimos tiempos, con muchos cambios de técnicos y otras situaciones, uno sabe muy bien que por algo pasan las cosas y no es fácil cambiar de un momento al otro. Tenía la esperanza de salir antes de tiempo de esta situación y pelear algo más importante, sin embargo, no se dio”.
Por sus antecedentes como técnico está acostumbrado a pelear más arriba que abajo, ¿cómo es para usted afrontar una lucha por no descender?
He pasado por todas las situaciones y como jugador mucho más. Estuve en equipos chicos, en los que hicimos buenas campañas, pero ahora que lo recuerdo, esta es la primera vez como técnico que peleo el descenso, pese a que no es una situación extrema. Sin embargo, un entrenador debe estar preparado para todo y puedo asegurar que sé cómo se enfrentan todas las situaciones.
¿Esta vivencia es la más complicada que atraviesa como técnico?
Sí, aunque esta situación que vivimos no me asusta. No la quiero vivir, creo que ningún entrenador o jugador lo quiere vivir. Sin embargo, hay que ser sincero al hacer los análisis del por qué se llegó a esta situación. Debo reconocer errores que he cometido, las virtudes y también la gente que me rodea (directivos, gente y jugadores), es un balance que debemos hacer todos.
Cartaginés tiene claro a qué juega, pero si se ven los números dicen que usted y el equipo tienen uno de los peores rendimientos del club, ¿qué explicaciones encuentra?
Noto que el equipo es ordenado, pero pese a ese orden se cometen errores individuales en momentos del partido que no deberían pasar. El tema del balón es el más lejano a lo que hubiese querido, porque me gusta que el equipo pueda manejar la pelota, cosa que no hemos hecho, salvo en algunos pasajes de partidos.
¿Tiene deseos de continuar al finalizar el Clausura 2018?
Sí, esto no se puede ocultar. No puedo decir algo que no siento y lo que siento es que si puedo trabajar desde el inicio, formar mí grupo, delinear la planificación de la pretemporada, es el deseo de cualquier entrenador. Cuando un técnico llega a la mitad se incorpora a un grupo que no escogió, con jugadores y que estaban.
”Tengo los deseos de hacer algo importante en este club, porque este equipo ha tenido muchos golpes a lo largo de su carrera y me gustaría ser partícipe de algo importante. Ahora que tenemos la posibilidad veremos si se puede iniciar con un proyecto desde cero.”
Vida personal en Costa Rica
¿Cómo ha sido su experiencia personal en Costa Rica?
Uno como tiene tanto recorrido en el fútbol en términos generales, ha conocido diferentes costumbres e idiosincrasias. La experiencia es muy buena, Costa Rica es un lugar muy agradable para vivir, porque en este trabajo uno está dos o tres horas con los jugadores y luego fuera de él en el diario vivir.
”Es un país muy agradable y tranquilo, la parte negativa sería que la pasividad y tranquilidad en el diario vivir algunas veces se lleva al campo”.
¿Qué hace cuando no está entrenando?
Paso mucho tiempo en la casa, salgo a almorzar, descanso en la tarde, veo los partidos, trabajo con el equipo y edito los videos, que esta parte es pesada. Generalmente estoy viendo fútbol, observo partidos internacionales y hablo con mi familia. Es bastante rutinario mi día, vivo en un lugar tranquilo y callado, estoy cerca del estadio, así que voy y vengo caminando cuantas veces sea necesario.
¿Qué tanto le costó alejarse de su familia y venir solo?
Es lo más difícil, porque uno está acostumbrado a estar con la familia. Tengo una hija pequeña, que es la edad en la que más lo necesitan y uno también. Se sufre mucho esto, pero mi familia sabe muy bien que antes de casarme con ellos, me casé con este deporte, entonces no me sirve de mucho estar en mi casa y no en lo que más quiero.
”En la vida no se puede tener todo, pero sabía a lo que venía y la forma en la que me iba a manejar. Además, trato de estar conectado lo más posible con mi familia mediante la tecnología. Vine con mucho gusto, porque estoy haciendo lo que me apasiona.
Cuando algo sale bien o mal se acuerpa en la familia, ¿qué tanto lo golpea no tenerlos en estos momentos tan complejos?
He tenido muchos amigos, hay directivos que se han portado bien conmigo y han estado cerca. Uno debe saber que hay posibilidades que se tienen para estar con la familia y otros no. Trato de distraerme con lo que puedo y ahora el internet permite muchas cosas. Soy de mirar muchos partidos, leer artículos y esto ayuda a pasar el tiempo y nutrirlo a uno en lo profesional.
”Además, soy de hacer mucho deporte, correr e ir al gimnasio. Todas las broncas y la tristeza las canalizo mediante el deporte”.