Johnny Acosta no continuará en Saprissa, aunque su deseo era seguir vestido de morado.
El jugador hizo oficial su salida este miércoles mediante redes sociales y minutos después conversó con La Nación.
“Claro que quería seguir, siempre tuve en mente eso, que quería continuar, pero eso no solo dependía de mí”, comentó.
Acosta terminó contrato con el equipo tibaseño, por lo que estaba pendiente su posible renovación. Finalmente, la S prefirió no extender más el ligamen.
Víctor Cordero, gerente deportivo, fue el encargado de informarle sobre esta determinación. El jugador no habló con el técnico Wálter Centeno y tampoco recibió mayores explicaciones de su salida ni las pidió.
“No entré en más detalle, simplemente hablé con don Víctor, quien me dijo que no me iban a renovar. Les agradecí la confianza que me habían dado y nada, es parte de la vida”.
El experimentado futbolista se mostró muy tranquilo, sin ningún tipo de resentimiento o reclamo hacia el club tibaseño.
Afirma que cuando tuvo minutos siempre intentó dar el máximo esfuerzo y por sale del Monstruo con “mucha calma”.
“Me siento satisfecho porque creo que los momentos en que jugué lo hice de buena forma, entregué el máximo. Uno se va con eso, con saber que hizo las cosas bien, tranquilo; si no hubiese hecho cosas bien estaría preocupado”, añadió.
Acosta tuvo menos participación de la esperada en el equipo de Paté Centeno. En total apareció durante 818 minutos distribuidos en 13 partidos, de los cuales solo fue titular en ocho.
Las últimas cuatro semanas del certamen no las pudo jugar por una lesión.
Su poca regularidad contrarresta con el deseo que mostró Centeno desde torneos atrás por tener al central en sus filas. Después de varios intentos, finalmente lo consiguió para el Apertura 2020.
Las cualidades de Acosta para salir jugando con la pelota coinciden con la idea futbolística del estratega de Tibás, sin embargo, nunca pudo ganarse un campo como estelar. ¿Por qué?
El futbolista asegura que eso habría que preguntárselo al entrenador, pues él desconoce la razón.
Eso sí, nunca se sintió con el puesto asegurado.
“Creo que todos trabajamos para jugar y al final el que toma las decisiones es el profesor”.
En su posteo en Instagram el zaguero de 37 años destacó el recibimiento de la afición hace seis meses, cuando se anunció su fichaje.
“Desde el primer momento me brindaron ese voto de confianza, lo único que podía hacer era retribuir esa confianza dando todo lo que tenía cuando podía jugar. La afición vio que siempre entregué el 100%”, concluyó.