En medio de la zozobra y la impotencia de los jugadores, cuando los ánimos estaban por el suelo, el técnico Héctor Pity Altamirano guardó silencio en el camerino por unos segundos y comenzó a gestar el histórico “Tolucazo”, con el cual Herediano venció 2-3 al Toluca de México y los eliminó de la Concacaf Liga de Campeones contra todos los pronósticos.
El mexicano, sin aspavientos, pero con gran convencimiento, apeló al orgullo de sus jugadores, a su corazón y deseos de trascender para lograr una remontada inimaginable que los catapultó a uno de los pasajes más memorables del Team y del fútbol costarricense.
Al terminar la primera parte del juego de ida en el estadio Nemesio Diez, el marcador mostraba un lapidario 2-0 en contra del conjunto costarricense y un 4-1 en el global de la serie. Parecía entonces una misión imposible de remontar.
Con rostros cabizbajos, los futbolistas rojiamarillos ingresaron al camerino con una rabia interior que fue parte del revulsivo que los llevó a darle la vuelta a la historia.
El estratega azteca admitió que los primeros 45 minutos no fueron buenos para su equipo y que el planteamiento se desajustó con la primera anotación en contra. No obstante, en el camerino habló con sus jugadores y sabía que lo primero que debía hacer era convencerlos de que tenían la capacidad para salir adelante.
“En el medio tiempo hablé con los muchachos. Les digo que teníamos el potencial para jugar. Les dije que lo único que podíamos perder era el partido, pero a partir de ese momento podíamos construir algo importante. No solo en este torneo, sino también para nuestro torneo local”, recordó Altamirano.
En silencio, cada jugador escuchó atento al profe, convenciéndose así mismo de que aún había esperanzas, que no había nada imposible y que cada uno era dueño de su destino.
“Les decía que cada vez que se pongan esta camiseta, saquen pecho y se sientan orgullosos. Que más allá de lo táctico o del trabajo de la semana, lo importante era competir. Les insistí en que debían competir contra ellos mismos, que si tenían deseos de trascender debían sacar la casta y aprovechar las oportunidades”, manifestó Altamirano.
Herediano empieza a gestar su hazaña
El Pity admitió que tras la charla vio a sus futbolistas tranquilos, más animados, y considera que el mensaje caló en cada uno de ellos.
“Para el segundo tiempo, cambió la mentalidad y la actitud. Siempre he creído que en la vida te vas a encontrar situaciones complicadas, pero en la medida en que adoptes una actitud que te permita avanzar, moverte, corregir y competir, creo que te puede ir bien. A veces saldrá, a veces no tanto. Pero sé el plantel que tengo y sé lo que me puede dar”, enfatizó Altamirano.
Al salir a la etapa complementaria, el timonel florense recalcó a sus futbolistas que era importante anotar rápido porque el Toluca iba a entrar en preocupación. Debían aprovechar el momento.
Andy Rojas abrió el camino de la remontada con su gol, y más tarde el ingreso de Joshua Canales y Francisco Rodríguez cambió el curso del partido con sus anotaciones, dándole la vuelta al marcador de forma dramática y asegurando el pase del equipo a la segunda fase, donde enfrentarán al Robin Hood de Surinam por los octavos de final.
“Al finalizar el partido no hubo palabras en el camerino, pero sí hubo muchos golpes de felicidad por la victoria. Estamos contentos. Logramos inculcarles ese sentido de pertenencia, ese deseo de trascender, de construir algo importante. Tengo jugadores de mucha calidad, seleccionados nacionales y jóvenes como Andy Rojas. Todo es cuestión de actitud, de querer lograr las cosas”, finalizó Altamirano.