Saprissa cumplió sus palabras. El técnico Iñaki Alonso lo había adelantado de forma tajante previo al juego de este miércoles ante Pumas: si la S quería ser fiel a su estilo, debía apostar a la victoria, “ir al frente, que se haga notar e incluso discutirle la posesión y control” al Pumas.
No fue solo una forma de decirlo, porque el conjunto costarricense salió con esa propuesta. Sabía que en el papel el favorito es -y sigue siendo- el Pumas, pero lejos de achicarse, salió decidido a plantarle cara.
La mejor versión de los tibaseños de este 2022 tuvo que remar contra marea, pero nunca desistió, fue capaz de levantarse dos veces, y aunque no le alcanzó para llevarse los tres puntos, el empate de 2-2 cambió por completo las apuestas de esta serie de octavos de final.
Aunque los aztecas comenzaron con mejor posesión, rápidamente Saprissa niveló y cuando se acercó al área rival, fue mucho más peligroso. En el minuto 15 Bolaños provocó la primera oportunidad, luego Jimmy Marín pegó una pelota en el palo y la Cueva se encendió.
La apuesta local era muy evidente, jugar de pie a pie, y al mismo tiempo ponerle velocidad a su ofensiva cuando fuese posible. Eso fue mucho más notorio en el inicio de la segunda mitad, cuando la S salió con la misma intención de buscar el gol.
Para entonces el marcador ya estaba 1-1. El Pumas se puso al frente en el minuto 27, precisamente cuando Saprissa jugaba mejor, pero en una distracción defensiva el delantero Washington Corozo le ganó la posesión al joven Gerald Taylor y concretó.
Hasta entonces la zaga tibaseña, disminuida desde hace varios días sin Kendall Waston y Ricardo Blanco, respondió bien, incluido Taylor, que se sigue llevando los aplausos de la afición pese a esa jugada del gol en contra.
El 0-1 no pudo con el entusiasmo morado, que encontró en su jugador insignia la oportunidad de empatar. Bolaños provocó el penal y el réferi Ismael Cornejo necesitó el VAR para señalar la falta (45′).
17 años después, Bolaños volvió a anotar al Pumas en la Cueva y dio algo de justicia al marcador.
Saprissa sabía que ese tanto no bastaba, sobre todo porque en este torneo el gol de visitante es definitorio en caso de empate; por eso trató de buscar la victoria. Darixon Vuelto estuvo a punto de celebrar en el minuto 56.
De Pumas había poco, precisamente porque su contrincante lo dominaba, pero como equipo grande, ya había demostrado que podía ser peligro en cualquier momento. Lo fue en el 60′, primero con una pelota en el palo y luego Aarón Cruz rechazó otro disparo.
Todo parecía del lado morado. Por eso el gol del argentino Juan Dinenno cayó como balde de agua fría... a jugadores, afición y seguramente el cuerpo técnico, que no desesperó, mantuvo la calma y Bolaños apareció de nuevo con el 2-2 definitivo para mantener la esperanza morada.
Todo se definirá el próximo miércoles en México.