Los siguientes hechos marcaron la temporada de Óscar Ramírez al frente de la Liga Deportiva Alajuelense.
El agua de Marcelo Sarvas. El domingo 27 de febrero, en un partido frente a San Carlos en el estadio Carlos Ugalde, el técnico tuvo uno de los momentos más recordados; el volante brasileño, Marcelo Sarvas, siendo jugador de la Liga, le tiró agua en la espalda. La acción se dió al momento que Sarvas llegó a conversar con Ramírez al banquillo, este le dijo algo con enojo, y, al volverse para sentarse, el suramericano le tiró el líquido que le quedaba en una botella.
Medio año sabático. Después de ganar el título del Invierno 2012, su cuarta corona con los manudos, Óscar Ramírez comentó que estaba cansado y se retiró de la dirección técnica por seis meses. En aquel momento manifestó que su estado físico y emocional estaba deteriorado, y necesitaba reposo. A su regreso, en el Torneo de Invierno 2013, volvió a ser campeón.
Careo con directivo morado. El 5 de diciembre del año anterior, tras el primer partido de la semifinal del Invierno 2014, en el Ricardo Saprissa, el dirigente morado, David Gutiérrez, interpeló a Ramírez, a quien le dijo, en la zona mixta: “Macho, usted le hace un daño al fútbol de Costa Rica. Venga a jugar, saque el bus. Así no vamos a mejorar”. Ante ello, el Macho le respondió: “¡Respete señor! Hey por favor, nosotros no hacemos esas cosas, no se vale, no puede llegar usted a decirme eso”.
Culpa de los árbitros. En la reciente final contra Herediano, la cual acabó este sábado en el Rosabal Cordero, y la perdió la Liga, Ramírez fue expulsado al cierre de los tiempos complementarios por criticar a los árbitros. “Pido disculpas por la expulsión, pero sí sentí que en algún momento el árbitro a puro pito nos metió ahí (al área)... todo el torneo me han robado, y eso fue lo que le dije yo -a Rándall Poveda, árbitro de la final-, sé que son humanos (silbateros) pero a veces no se vale que cambien las reglas”, comentó al perder ante los florenses.