Desde el día uno, el técnico Iñaki Alonso ha gozado del respaldo y buenos comentarios de los futbolistas del camerino de Saprissa, sobre todo de Christian Bolaños, quien luego de los primeros entrenamientos con el español al mando, se deshizo en elogios para el estratega. Esa sensación no ha cambiado, incluso cuando los morados siguen lejos de la zona de clasificación y con resultados adversos.
Tras el parón del torneo regresaron las malas noticias, con tan solo un punto de seis posibles, y la paciencia de la afición se acaba, sobre todo con reproches hacia el director técnico. Eso es normal, asegura Bolaños y Mariano Torres, porque los seguidores morados tienen derecho a reclamar los malos resultados. Sin embargo, desde el punto de vista del ídolo tibaseño, en este caso el fútbol es un poco injusto con Alonso.
“La afición tiene derecho a decir lo que quiera. Están en todo su derecho, lo respetamos, porque cuando vienen y pagan entrada, ellos quieren ver otra cosa. Nosotros no salimos contentos, el profesor tampoco. Si la afición grita fuera Iñaki o cualquier otro entrenador que esté, es parte del fútbol, hay que tener calma, porque las posibilidades ahí están, hay que analizar cómo se están dando las pérdidas”.
Para Bolaños no se trata solo de las derrotas, que son claras, sino cómo han llegado y, en muchas ocasiones, asegura, el equipo ha jugado bien, pero se pierden o empatan los partidos por algún error puntual. Eso mismo también expresa Iñaki, creyente de la mejoría.
“El respaldo nuestro hacia el profesor es al cien por ciento, nos gustaría que se reflejara en resultados, lo mencioné después de que vinimos de México, pero se dan errores, no los queremos cometer; aquí queda arroparnos, pensar en que quedan varias jornadas; todavía podemos entrar a clasificación, queremos ser líderes”.
Considera además que Iñaki Alonso sí les ha enseñado y eso también es valorado por el camerino: “Hay algo clarísimo en el fútbol, los procesos son los que dan resultados, cuando a un entrenador no le va bien y no deja nada de enseñanzas, usted le puede preguntar al final del día a los jugadores si ese entrenador le enseñó algo... Hay otros que pueden ganar y no te dejan nada como jugador; hay que encontrar ese balance. Primero la responsabilidad es nuestra, porque hay situaciones en las que el entrenador no puede hacer nada y eso es un poco injusto en el fútbol. Ahí somos bastante maduros como para ver el video, analizar y dar responsabilidades para el que tuvo el fallo, aquí todos perdemos o ganamos pero así es el fútbol, yo lo veo de esa manera”.
De acuerdo a sus palabras, el menos culpable es el entrenador, al menos en el empate de 2-2 ante Guanacasteca, equipo que les igualó en el último minuto del partido.
“Somos seres humanos y podemos equivocarnos; entonces lamentablemente esa es la parte difícil de ser jugador y más entrenador porque depende de los once en la cancha y si un jugador tiene un mal día el trabajo del profe se viene abajo”.
“Vemos el trabajo que hace con nosotros, las ideas que nos da, las armas... Al final salimos dolidos, porque hicimos un trabajo bueno y en la última jugada nos empatan”.