Una derrota de primera entrada no era la forma en la que Luis Marín quería arrancar su era al frente de Alajuelense, pero este resultado reitera que el equipo necesitaba un cambio con urgencia y que a él le espera mucho trabajo.
Cuando se acabó el partido, el técnico se reunió algunos minutos con su asistente Harold Wallace, luego ingresó a un camerino donde encontró caras largas.
Más que una reprimenda por perder por 2-1 contra Santos, él trató de que sus hombres entraran en razón.
Después de ocho partidos oficiales sin ganar, la Liga refleja estar golpeada mentalmente. Eso es algo detectado por el nuevo técnico.
“La parte mental no es sencillo, cuando usted no gana cinco, seis o siete partidos, eso de alguna manera afecta esa parte, pero eso es lo que les dije a los muchachos, es donde tenemos que sacar ese carácter, esa personalidad, esa garra, ese corazón, que en estos momentos tenemos que apelar a la unión de grupo, a la confianza de ellos mismos sobre ellos mismos, a la confianza de que son sumamente capaces”, apuntó Marín.
Durante esa encerrona en el Estadio Ebal Rodríguez, el timonel les dijo que básicamente son el mismo equipo venía de cerrar 22 fechas invicto.
Lo que busca es que sus dirigidos entren en razón, porque Alajuelense pasó de no perder a no ganar y la confianza regresará cuando corten esa racha.
“Estamos en un momento en el que tenemos que apelar a confiar en nosotros, en nuestro trabajo y en ellos para poder salir adelante, todos unidos. Ese es el mensaje que les dimos”, insistió.
Marín afirma que confía plenamente en los muchachos y en una institución que a lo largo de su historia ha pasado momentos así, que han sido muchos, que logró reponerse “y de esta se va a levantar”.
“Es claro que estamos en un momento de malos resultados que se viene arrastrando desde hace un tiempo atrás, pero confiamos plenamente en que vamos a salir de eso, seguro que lo vamos a hacer y este equipo peleará el campeonato al final del torneo. Yo confío plenamente, somos Liga Deportiva Alajuelense, una gran institución y esto se va a revertir en cualquier momento”.
Marín no tiene una varita mágica para cambiar a Alajuelense en cuestión de dos días. Afirma que está analizando algunas cosas y tiene claras las situaciones que el equipo debe mejorar.
“Desgraciadamente el calendario en este momento nos perjudica porque estamos jugando muy seguido y difícilmente en dos días usted puede cambiar muchas cosas, pero vamos a apelar mucho a la capacidad de los jugadores, a la capacidad nuestra y a la información que les podemos dar para poder mejorar”, acotó.
Alajuelense se enfrentará el sábado a Herediano, a las 8 p. m., en el Morera Soto.