Marcel Hernández está dispuesto a ponerse al día cuanto antes y sus compañeros también intentan echarle una mano.
Él es el nuevo de la clase y en esos 31 minutos que jugó contra Pérez Zeledón se notaba que apenas estaba ingresando al aula, en este caso, la cancha, con un método de trabajo y una idea de juego a la que no está acostumbrado.
Para el cubano fue una especie de examen de diagnóstico, porque al recién llegado a Liga Deportiva Alajuelense ni siquiera le dio chance de tener una práctica completa antes de debutar con los rojinegros.
Su presentación oficial fue el lunes y ese día solo cruzó un par de palabras con José Miguel Cubero. El martes ingresó por primera vez al camerino, pero al ser el día previo al debut del campeón nacional en el Clausura 2021, la sesión no era de táctica ni de estrategia.
Hernández recibió algunas pinceladas, más teóricas que prácticas, pero en la Liga tomaron la decisión de darle minutos como parte de la misma preparación, porque con él tratan de que sea un curso intensivo en tiempo récord.
El sábado vendrán más minutos para el cubano, cuando los erizos visiten a Limón en Guápiles, a las 3 p. m. y, después de eso, unos entrenamientos más.
La intención de Alajuelense es que el isleño esté más acoplado a su estilo de juego para el duelo a un partido único del próximo miércoles, contra el Olimpia de Honduras, en la semifinal de la Liga Concacaf.
En ese duelo no podrá actuar Johan Venegas, porque ya había jugado con Saprissa en esa competición. Hernández sí está habilitado y los manudos quieren avanzar a la final de ese torneo. Para la Liga de Campeones de Concacaf, Alajuelense sí tendrá disponible a su equipo completo.
La Liga tiene retos importantes y el cubano está muy contento por ser parte de eso. Hernández explicó en la zona mixta a Teletica Radio que el grupo lo recibió mejor de lo que pensaba.
“Me trataron de buena manera, estoy impresionado por el trato de todos, tanto de la parte administrativa, como del resto de jugadores y eso me deja tranquilo en todo sentido. Ahora me toca responderles a todos con goles y un buen juego”, expresó el cubano.
Contó que los primeros en romper el hielo con él fueron Bryan Ruiz, Leonel Moreira, José Miguel Cubero y Johan Venegas.
“Más que todo el rol será de aprendizaje e intentar nutrirme de estos jugadores que tienen más años que yo en esto y saber cómo están las cosas. Uno tiene que saber a qué viene y buscar siempre sumar y aprender. Yo no he tocado techo pese a tener 31 años”, indicó.
De la Liga, con el único que había jugado era con Jurguens Montenegro, cuando el porteño estuvo a préstamo en Cartaginés.
Ante Pérez Zeledón, Hernández fue suplente e ingresó en el minuto 59 en sustitución de Montenegro; justo cuando Andrés Carevic sustituyó a Alex López por José Miguel Cubero y trece minutos después salió Bryan Ruiz, relevado por Brandon Aguilera.
“Estoy feliz, contento, agradecido con el colectivo técnico por la confianza, a pesar de no haber entrenado, creo que es importante ese momentico”, apuntó.
También se refirió a su salida del cuadro brumoso, porque insiste en que la decisión de irse no fue fácil.
“Si te dijera por la puerta grande, sería siendo campeón, que siempre fue mi objetivo. Solo Dios sabe que así me lo propuse durante cinco torneos y di todo lo que tenía para poder lograrlo y no me alcanzó. Me voy con ese dolor y con esa deuda pendiente que está en mí como ser humano”, expresó.
Y agregó: “Al final creo que es profesionalismo, hay que poner en la balanza muchas cosas, donde yo empecé a ser profesional con 26 años. Quizás si hubiese empezado con 18 el tema fuera diferente. Empecé tarde y cuando llegué a Cartaginés pagándomelo todo, siempre en mi mente estaba el crecer”.
Asegura que puso muchas cosas en la balanza y se preguntó hasta qué punto estaba dispuesto a avanzar, porque siente que puede dar un poco más.
“Hubo cosas que en estos momentos no voy a tocar, cuando puse en la balanza el crecimiento personal y profesional, partiendo de que comencé a jugar profesional tarde, entonces necesitaba dar ese salto y más si quiero posteriormente irme al exterior. Hay cosas que tuvieron su peso, pero no me voy a referir”, señaló, sin entrar en más detalles.
Eso sí, hace una aclaración. “Lo económico nunca fue un factor, nunca. El presidente (Leonardo Vargas) sabe que lo económico no fue un factor, él lo sabe, hubo muchísimas reuniones en este último tiempo con el presi, al que le agradezco y estoy feliz por lo que pasamos juntos, pero lo económico dejó de ser un factor importante cuando hubo otras situaciones que él y yo sabemos”.
Su presente es Alajuelense y se siente muy contento de ser parte de la Liga.
“Muy bien, solo palabras de agradecimiento, de tranquilidad, porque me han recibido espectacularmente, desde los administrativos hasta los jugadores de más rango. Al final ha sido un complemento de todo. He tenido aceptación por todos, desde el rondo que hicimos hasta la parte administrativa y me deja tranquilo porque puedo trabajar”, destacó en Radio Columbia.