El pasado 1 de julio escribí en una columna sobre la necesidad (valga decir, urgencia) que tenía Alajuelense de hacer un cambio de roles en el equipo.
Esta variante, que debía ser radical, sugería la importancia de refrescar los liderazgos futbolísticos del club, dado que a los referentes no les estaba alcanzando para pesar en momentos decisivos.
Básicamente, los futbolistas llamados a cargar con el peso del plantel son los que lideran la tabla salarial del equipo. Es decir, se espera que los que más ganan sean los más influyentes, principalmente en las finales.
Posicionalmente, Jonathan McDonald y Bryan Ruiz son jugadores distintos, pero tienen algo en común que es evidente:
Se espera tengan un peso real en las etapas claves.
De McDonald rescato su pundonor y carácter. Realmente creo que Herediano hizo una buena contratación; rodeado de futbolistas de experiencia, que son los que cargan con el peso del 'Team', el delantero se libera de esa presión.
Tampoco se puede dejar de lado que en la era de Óscar Ramírez, con otros líderes como Pablo Gabas y Johnny Acosta a la par, McDonald rindió y fue campeón.
Sin embargo, su etapa en la Liga ya estaba desgastada. Estaba llamado a convertirse en el jugador más importante del plantel en las etapas finales y no lo logró. De las 11 finales que disputó, solo ganó 2, la última en 2011.
McDonald argumentó en el programa Encuentro Deportivo que, " no jugó solo" y probablemente tenga, en parte, razón, pero de los futbolistas más influyentes (y los que más ganan) se espera que aparezcan en los momentos decisivos.
La llegada de Bryan Ruiz significa un cambio de roles. Alajuelense necesita de un jugador que adquiera un rol protagónico.
La Liga se da cuenta de que le ha costado al catracho Alex López, y de que algunos futbolistas que rinden en la fase regular, aún no están preparados para ser determinantes, como el caso de Ariel Lassiter, que es muy probable que aprenda y mejore mucho a la par de Ruiz.
Es imposible asegurar si Bryan hará campeón a la Liga, como también es difícil afirmar que rendirá acorde a las expectativas, cuando lleva más de un año sin jugar.
Sin embargo, su llegada marca un antes y un después en la Liga.